"Para que las cosas queden bien, antes, casi siempre están mal". Esa es la explicación que daba ayer la alcaldesa de Moraleja del Vino, Eva Calvo, ante las quejas que han provocado entre los vecinos los cortes de la carretera que pasa por el pueblo, concretamente en la calle Pozo, calle La Majada y calle Toro.
Y es que, según el Ayuntamiento, es necesario realizar esta desviación de tráfico y cortar el agua por la acometida que se está haciendo con las tuberías de abastecimiento, dentro del proyecto de renovación, financiado mayormente por la Diputación, a cargo de los Planes municipales 2016. "Las tuberías con más de 60 años hay que renovarlas porque dan muchas averías, y entiendo que ahora en verano el corte de agua o del paso de vehículos sea un inconveniente, pero no hay otra manera de garantizar la buena marcha de los trabajos".
Son cerca de 1.000 metros de tubería lo que se está introduciendo en el pueblo, y cambiando también el sistema de llaves en el suministro. "Hasta ahora con la llave de paso existente, si había una avería, cortabas y dejabas sin abastecimiento a buena parte del pueblo. Lo que trata de hacer la empresa es poner más llaves en diferentes tramos, para disminuir el efecto negativo en las viviendas".
Las obras de mejora en el abastecimiento en Moraleja del Vino, que comenzaban la primera semana de agosto, es previsible que estén concluidas el 30 de septiembre, que es el plazo que ha dado la institución provincial para certificar las obras.
Desde el principio, los responsables municipales, colocaron bandos en diferentes establecimientos de hostelería y venta en el municipio, así como en el tablón de anuncios de la casa consistorial, avisando de los trabajos de fontanería a realizar.
