El mayor incendio forestal del verano -en cuanto a extensión- calcinó ayer más de 400 hectáreas de superficie en el término municipal de Ferreruela de Tábara. Fue un incendio intencionado, como confirmaron tanto el delegado de la Junta, Alberto Castro, como el director general del Medio Natural, José Ángel Arranz, porque se declaró a las 2.13 horas de la madrugada, al lado del camino rural asfaltado que comunica Escober y Sesnández de Tábara y se localizaron varios focos. Datos determinantes que llevaron al propio Arranz a hablar de "atentado ecológico".

La importancia del siniestro obligó a declarar nivel 1 de riesgo y no fue hasta media tarde de ayer cuando se redujo a nivel 0. Todo ello después de que las cuadrillas terrestres, por la noche, y la incorporación de los medios aéreos, por la mañana, se emplearan a fondo para hacer frente a las llamas que, según algún vecino, alcanzó un frente de varios kilómetros. "Se veía un resplandor que metía miedo" comentaba un vecino de Sesnández tras advertir de madrugada el movimiento de medios de extinción.

La zona afectada -fuera de los límites de la Reserva de la Culebra- ha sido monte bajo, matorral, jaras, urces y encina, además de algún pinar de propiedad particular. El fuego se inició en el paraje conocido como la Fuente del Carrizal para continuar ladera arriba por El Caliente hasta la Peña del Horno.

Las llamas han esquilmado el aprovechamiento micológico en una zona abundante en Boletus edulis, como confirmó el alcalde de Ferreruela de Tábara, Ángel Román. Y también se verá afectada la caza; abundan los ciervos y jabalíes, y en caza menor, sobre todo zorro y perdiz.

Pese al viento y a la previsión de tormenta eléctrica, el operativo pudo controlar a las cinco de la tarde el incendio tras la movilización de cinco técnicos; once agentes medioambientales; tres helicópteros, uno de coordinación, otro de Villaralbo y uno más de Villardeciervos; dos aviones de carga en tierra de Rosinos, y dos anfibios de Matacán; dos cuadrillas helitransportadas y seis de tierra; seis buldózer; cuatro autobombas; una unidad de meteorología; y una dotación de bomberos de la Diputación.

Por otro lado, al cierre de esta edición permanecía activo un incendio en el término de Porto de Sanabria que se había declarado a las 12.20 horas. Medios terrestres y aéreos, incluidos dos helicópteros de laza (Galicia) trabajaron en la zona a lo largo del día.

El operativo de la Junta de Castilla y León también estuvo trabajando en incendio declarado en el pueblo alistano de Ribas (del Ayuntamiento de Viñas) una vez controlado al mediodía del martes tras declararse la tarde del lunes y que ha podido arrasar alrededor de cincuenta hectáreas de monte bajo.