La villa de Alcañices acogió el pasado fin de semana la fiesta de los quintos y quintas alistanos y trasmontanos nacidas en 1951. Hombres y mujeres que tras una larga vida laboral este año se jubilan para disfrutar de la vida con todo el tiempo libre. Muchos de ellos conocieron como niños los duros años de la posguerra con unos pueblos, los alistanos, superpoblados y con pocos recursos, donde las familias se veían obligadas a salir adelante practicando la agricultura y la ganadería.

Fueron tiempos de éxodos rurales que le llevaron a muchos de ellos a tener que emigrar y buscarse la vida lejos de su tierra, País Vasco, Madrid o Cataluña, en España, y Francia, Suiza y Alemania en el extranjero. Los actos culminaron con una comida de hermandad y convivencia en el Disco Rojo, donde recordaron viejos tiempos e intercambiaron experiencia de juventud e infancia por Aliste y por el mundo.