La asociación Astauvi, que integra a más de un centenar de jóvenes villalpandinos aficionados a la tauromaquia, lleva ya una década contribuyendo a mejorar las fiestas patronales de San Roque, organizando un festejo que ha ido ganando en popularidad hasta convertirse en uno de los actos más esperados y concurridos del programa festivo, su Toro de la Juventud. Para conmemorar la efeméride, los socios de Astauvi este año han decidido "dar un paso hacia adelante" y han comprado un "toro, toro" que correrá por la Plaza Mayor de la villa terracampina el miércoles 17 de agosto, un astado "con el trapío y la presentación que este año merece", explica el presidente del colectivo, Carlos Alonso.

El festejo se venía celebrando desde 2007 con un utrero y un gran éxito de afluencia, pero en esta ocasión han hecho lo imposible para reunir el dinero necesario para adquirir a Cigarrero, de la ganadería El Puerto de San Lorenzo, herrado con el número 34, de guarismo 1, un toro negro de capa con encaste Lisardo-Atanasio, "un toro que sería apto para cualquier plaza de primera categoría de España", asegura Carlos Alonso, pero que tendrán el privilegio de disfrutar los mozos de Villalpando y todos los taurinos que se acerquen a la villa terracampina con motivo de sus fiestas de verano. Cigarrero pisará la arena de la Plaza Mayor en la tarde del 17 de agosto.

"Siempre hemos buscado, en distintos encastes, un ejemplar que tenga unos requisitos morfológicos acordes a su procedencia, y que por su belleza imponga respeto en la Plaza", explica Alonso, y parece que este año lo conseguirán con creces. No por su tamaño, "no vamos buscando el toro más grande", sino por su calidad, "queríamos trapío, un astado que imponga respeto por la armonía de sus formas", destaca el presidente de Astauvi. Este criterio es consecuente con el objetivo principal de la asociación: difundir la idea de que "el toro bravo es el protagonista de la fiesta, y hay que valorarlo y respetarlo, para valorar, mantener y respetar los festejos taurinos".

La joven asociación ha podido acceder a Cigarrero gracias al esfuerzo de todos sus socios -han subido las cuotas para ello-, y sobre todo, gracias a la colaboración de las empresas que patrocinan el evento, así como del Ayuntamiento de Villalpando. Un esfuerzo colectivo que "merece la pena para reflejar estos diez años de lucha por dar protagonismo al animal bravo", en los que no solo han venido soltando su Toro de la Juventud cada 17 de agosto, sino que en 2013 alumbraron un nuevo festejo para el día de la patrona, el Toro de la Púrisima, otro toro de cajón que llena la Plaza Mayor cada 8 de diciembre, fecha que a pesar de ser festiva en la villa contaba con pocos actos culturales en los últimos años. Los festejos taurinos son poco habituales en esa época invernal, quizás precisamente por eso el acto que organiza Astauvi en diciembre atrae a más gente cada edición, no solo de toda la comarca, sino de otras provincias como Valladolid y Salamanca que quieren saciar su hambre taurino que aprieta en esos meses.

La suelta de toros de cajón era hasta hace diez años una novedad en Villalpando y para los villalpandinos, aunque desde Astauvi indican que al retomar esta práctica, habitual en otros pueblos de Castilla y, sobre todo en el Levante peninsular, en realidad estaban recuperando una vieja costumbre autóctona, ya que en tiempos pretéritos esa era la única forma de transportar a los animales bravos desde el campo hasta el núcleo urbano, puesto que no existían los camiones actuales. Además, añaden desde la asociación, sus ancestros villalpandinos ya donaron un toro para las fiestas populares en 1494, así que, "sin pretenderlo estábamos reescribiendo la historia, retomando una costumbre del medievo".

El utrero que tuvo el privilegio de ser el primer Toro de la Juventud de Villalpando en 2007 fue Canastón, de la ganadería de Trifino Vegas, después pisaron la arena del ágora villalpandina Compañero, de encaste Marqués de Domecq; Chorlito, de la ganadería Montalvo y encaste Jijona (Martínez) y J. P. Domecq (Jandilla); Alambrisco, de la ganadería El Pilar y encaste Aldeanueva; Lirón, de Puerto de San Lorenzo, igual que Cigarrero, y encaste Lisardo Sánchez; Malagueño, de la ganadería Fraile Mazas y encaste Atanasio Fernández; Travesura, de Sánchez de Ybargüen con encaste Marqués de Domecq; Linero, de Los Bayones y encaste Lisardo Sánchez; y Tomatillo, de Adolfo Martín y encaste Saltillo-Albaserrada