Con seis votos a favor, uno en contra y una abstención el Pleno de Moraleja del Vino dio luz verde a mantener el nombre de la calle infanta Cristina "después de que un grupo de vecinos que viven en esta vía hayan remitido un escrito al Ayuntamiento solicitando que la calle se quede como está por los múltiples trastornos que conlleva la modificación".

Con este argumento presentó la alcaldesa, Eva Calvo, la propuesta de votación de un asunto que se ha enrevesado de tal forma que el Pleno se ha desdicho a sí mismo. Y si en una reciente sesión acordaba eliminar a la infanta del callejero ahora decide mantenerla.

La propuesta de borrar el nombre de la calle surgió a raíz de la imputación de la infanta Cristina por un supuesto blanqueo de dinero obtenido a través del instituto Noos en el que trabajaba su marido, Iñaki Urdangarín. La iniciativa de IU fue llevada a Pleno: todos los concejales se abstuvieron excepto dos que votaron en contra. Y frente a lo que creía la mayoría resultó que la propuesta fue aprobada por la simple razón de que tenía más votos a favor, dos, que en contra, ninguno. En paralelo, vecinos de Moraleja del Vino a través de la plataforma Change.org mostraban su apoyo a la retirada de la placa de la infanta.

El tiempo fue pasando y el equipo de Gobierno no movía ficha para cumplir el acuerdo plenario, hasta que por fin el mes pasado el asunto pasa de nuevo por Pleno y por mayoría se acuerda la retirada del nombre de la calle a la infanta Cristina. Sin embargo, el asunto se vuelve a encallar porque se proponen hasta tres nombres alternativas, sin que ninguna obtenga mayoría: el piragüista Emilio Merchán, el exalcalde Guillermo Freire y la maestra Justa Freire, que era la que había sido propuesta por IU en el arranque de este conflictivo asunto.

Y entre esa sesión y la de ayer es cuando surge un nuevo elemento, la carta de los vecinos de la calle en la que se muestran contrarios a modificar el nombre por los trastornos que ello acarrea, de cambios en documentación, contratos, y todo tipo de papeles oficiales donde figure Cristina de Borbón.

Así las cosas la propuesta sigue adelante, si bien Izquierda Unida criticó la resolución del caso porque "algo que ha sido aprobado en el Pleno y que no se hizo efectivo, ahora se deshace".

Es precisamente en los núcleos rurales donde más resistencia se tiene a retirar a la infanta Cristina de su callejero, como sucede en Santa Marta de Tormes y Aldeatejada (Salamanca), mientras la hermana del rey está ya olvidada en muchas localidades del país, que han dado denominaciones nuevas a calles, plazas , centros culturales y polideportivos. Es el caso de Murcia, Madrid, Alicante, Almería y Palma de Mallorca.