Unos 200 barbos han aparecido muertos a lo largo de los últimos días en el río Cebal, atrapados por la bajada del caudal originada por el calor con la llegada del verano. Este pez es una de las especies acuáticas más importantes en los ecosistemas de la comarca, así como en su cultura, porque durante siglos constituyó un importante alimento para las familias alistanas.

El río Cebal es cada año el primero en secarse a mediados de junio, aunque en 2016 ha mantenido un caudal más elevado a causa de la abundancia de lluvias que a su vez han contribuido a mantener los acuíferos que aportan a él sus aguas, como es el caso de la Fuente Fifionda" de Grisuela o el río Seco". Nace en pleno Campo de Aliste por Villarino Cebal y cruza por los términos de Grisuela, Rabanales y Fradellos, para unirse al Aliste en el Rodillón de la Aguilera, entre los límites de Valer y Flores.

Expertos en Medio Ambiente aseguran que "este pequeño río de aguas templadas y que discurre entre paredes de piedra, rocas y verdes prados es el elegido por el barbo común ibérico (Luciobarbus bocagei) para realizar la freza o desove, y en primaveras de mucha lluvia, como ha sido esta pasada, se pueden ver miles de ejemplares remontando el río hasta las zonas altas, saltando pequeñas presas, como si de un salmón se tratase y nadando corriente arriba como una ágil trucha común".

Las hembras de Barbo común suelen excavar, con su aletas caudales, un pequeño hoyo donde depositan más de 10.000 huevos de 2 milímetros de diámetro. Hay que tener en cuenta que el barbo es una especie de gran tamaño en comparación con el resto de ciprínidos, la familia a la que pertenece, en la que se encuentran escallos, tencas, gobios o bermejuelas, llegando a medir más de 40 centímetros de longitud.

"Después de la freza se dejan caer río abajo, pues están cansados y apenas tienen fuerzas para aletear. Muchos de ellos terminan atrapados entre las rocas o en pozas aisladas donde mueren por falta de oxígeno, siendo presas de cigüeñas, zorros, jabalíes y pequeños mamíferos", aseveran.

Teniendo en cuenta que es un animal que se descompone enseguida, para evitar que sean un foco de contagio de enfermedades, agentes medioambientales de la Comarca Forestal de Aliste llevan varias jornadas recorriendo el tramo del Cebal que hay entre Fradellos y Villarino Cebal, sacando fuera todos los peces que han muerto, para enterrarlos bajo grandes lajas de piedra con el fin de evitar que zorros y perros puedan desenterrarlos.