Los vecinos de Arcenillas se quedan sin agua potable en sus domicilios a partir de hoy, cuando el Ayuntamiento cortará el suministro debido a que la demanda que existe por parte de la ciudadanía es superior a la capacidad que tiene la potabilizadora para acabar con los contaminantes, en este caso los fluoruros que hicieron necesaria su instalación. Desde hace aproximadamente quince días el Ayuntamiento ya viene cortando en horario nocturno el agua para dar servicio durante el día. Aún así, con el aumento de población y la necesidad de más agua, ésta se hace escasa, lo que ha motivado la publicación de un bando municipal informando de las razones que obligan al corte y de las posibles soluciones a un problema de primera necesidad.

La Diputación Provincial, para evitar que el camión cisterna acuda a Arcenillas semanalmente, ha instalado una pequeña potabilizadora que, a modo de fuente, da servicio las 24 horas del día y está ubicada junto al depósito de agua antiguo, frente a las escuelas y el cuartel de la Guardia Civil. Esta máquina ofrece gratuitamente cinco litros de agua potable por cada pulsación, con destino al consumo doméstico para beber o cocinar. Para el resto de usos, como la ducha, limpieza y otros quehaceres domiciliarios el Ayuntamiento surtirá el agua del grifo con los tres pozos. "Problemas de cantidad no tenemos, pero si los análisis determinan que tiene alta concentración de contaminantes no es apta para el consumo humano", indica tajante el alcalde, Enrique Rodríguez.

Los problemas del agua de Arcenillas vienen de largo debido precisamente a la presencia de floruros en el líquido elemento, lo que propició que hace dos años se instalara una planta potabilizadora, pero como ha pasado en otros pueblos las previsiones del caudal se quedan cortas principalmente en verano, con el incremento de población en el mundo rural. Desde el Ayuntamiento ya se ha solicitado a la Diputación la ampliación de la planta que ya cuenta con todos los informes vinculantes aprobados y está a falta de que se licite la obra "y que, esperemos, sea lo más rápidamente posible, porque esta situación se hace insostenible en pleno siglo XXI", indica el alcalde.

Será la Institución Provincial la que asuma el coste en un 90% si bien a la administración local le toca aportar el 10% restante y el coste del proyecto, una inversión que ha obligado a aplicar recortes, concretamente en forma de supresión de espectáculos taurinos, como el encierro nocturno que tenía su espacio en el programa de las fiestas de agosto. "Hay que poner en la balanza lo esencial y lo secundario y después de una reunión con los vecinos se ha valorado el tema y hemos decidido suprimir el encierro nocturno", indica Rodríguez.