Torrefrades celebró ayer las fiestas en honor de San Antonio de Padua y aprovechó la ocasión para poner en marcha el Centro Cultural en que ha reconvertido la denominada Casa de Viriato. El destartalado edificio ha sido objeto de una profunda restauración y dotado de los muebles necesarios para servir como centro de reuniones y de actividades culturales. Una imagen del guerrero destaca en una de las puertas de acceso y, en el interior, unas fotografías dan fe del estado que mostraba la vivienda en su etapa más ruinosa. Torrefrades inició el viernes la programación festiva con talleres de manualidades, novena a San Antonio, juegos infantiles y asado organizado por los jóvenes. Ayer la jornada se completó con una proyección documental "Miradas sobre el Mundo Rural" de la Asociación "El Cigüeñal" y gran verbena. Hoy prosigue la fiesta con la Santa Misa, finales de campeonatos, exhibición de sevillanas y observación astronómica en el Molino Viejo.