Natural de Cuelgamures estudió Filología Inglesa en Salamanca e Hispánica en la Complutense, centro en el que ha realizado el doctorado con la tesis sobre "Madurez sintáctica e influencia de las TIC en la capacidad de redacción de niños y adolescentes españoles". La formación de Rocío Bartolomé incluye estancias en universidades extranjeras, como la Queen Mary en Londres, en Virginia (Estados Unidos) o el máster realizado en el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

El uso de las nuevas tecnologías en la enseñanza ha mermado la presencia de adjetivos en las oraciones, hay menos frases subordinadas y se pierde la capacidad de dar detalles, es decir, las descripciones son más pobres. Son algunas de las conclusiones a las que ha llegado Rocío Bartolomé Rodríguez, profesora de literatura inglesa y estrategias para la comunicación oral y escrita en esa lengua en la Universidad Nebrija de Madrid.

-¿Qué le lleva a investigar sobre el uso del lenguaje en las nuevas tecnologías de la información y comunicación?

-El cambio ha sido considerable. El estudio que realizo es más bien cuantitativo y habría que desarrollar otro cualitativo para ver hasta qué punto son beneficiosas, que lo serán. Pero lo que está claro es que el uso de adjetivos sí que ha disminuido, no hay capacidad de síntesis, porque se escriben muchas palabras dando muchos rodeos y hay problemas para concretar los mensajes de una manera clara. También observo que se pierde la capacidad dar detalles.

-¿Qué datos ha manejado en el trabajo de campo?

-El campo de investigación se ha llevado a cabo sobre 191 alumnos de centros públicos y privados en Zamora. Son estudiantes de cuarto de Primaria, segundo de la ESO y segundo de Bachillerato que cursan sus estudios en Fuentesaúco, Alcañices, Gema, Corrales del Vino y ya en la capital en los colegios Medalla Milagrosa y Sagrado Corazón. A todos ellos se les ha pasado un cuestionario sobre hábitos en internet, dos redacciones de cada alumno y luego se han cruzado datos como el uso de internet y el uso de adjetivos o de oraciones subordinadas.

-¿Y los sujetos de estudio qué tiempo dedican a Internet?

-Lógicamente son los de Primaria los que dedican menos tiempo, 52 minutos diarios de promedio, en segundo de la ESO dos horas 26 minutos y en segundo de Bachillerato tres horas y ocho minutos. La exposición a las tecnologías afecta en el aprendizaje y se pierde en capacidad de descripción porque cuando trabajas con el ordenador vas abriendo ventanas y eliges información muy puntual, a primera vista, exige una respuesta rápida, sin pararte a reflexionar y a pensar.

-¿Cuál es el mecanismo concreto de funcionamiento?

-Las tecnologías de la información y la comunicación abonan el campo necesario para que se produzca esa sobrecarga de información en la memoria a corto plazo. Por un lado, afrontamos varios tipos de información de manera muy rápida o casi simultánea, es decir, tan pronto leemos un email, como enviamos un mensaje de texto, o buscamos información en la web mientras abrimos Facebook y comprobamos si nos han respondido en Twitter. Por otro lado, cuando buscamos información sobre un tema en Internet, la tendencia es a leer en forma de F y pasar de una página a otra cada poco tiempo. La información que recibimos no es un flujo constante sobre un mismo tema que nos permita reflexionar sobre él, sino que es demasiada información y muy fragmentaria.

-Y todo esto ¿cómo afecta a la forma que tiene el cerebro de procesar la información?

-En conclusión, si no hay constancia, los circuitos cerebrales no se fijan, si no se fijan la memoria a corto plazo enviará información fragmentaria a la memoria a largo plazo, ésta no sabrá qué hacer con esa información y la almacenará pero no la conectará con nada, quedará ahí sin más, y en definitiva nuestro cerebro se convertirá en un mero almacén de datos, y nosotros en unos "descerebrados consumidores de datos". Esta forma de procesamiento de datos tan mecánica creemos que acarreará consecuencias.

-¿En qué sentido?

-Si procesamos de manera fragmentaria, produciremos textos de manera dispersa también. El automatismo en la recepción implicará automatismo en la producción. La brevedad, rapidez y concisión de procesamiento de la información propias de las TIC van en detrimento de los índices de madurez sintáctica puesto que la complejidad sintáctica de una estructura aumenta a medida que aumenta el número de palabras empleadas en la composición, el número de cláusulas subordinadas, de adjetivos calificativos, de adjetivos posesivos, frases preposicionales y aposiciones que se insertan en una oración. Por tanto, si lo que prima es la transmisión de información, es evidente que no nos vamos a detener en añadir conectores, adjetivos, posesivos, frases preposicionales, u oraciones subordinadas a nuestro texto.

-¿La utilización de las TIC por parte de los jóvenes debe alarmar a la sociedad?

-La industria de la tecnología y la publicidad están detrás de esta fiebre. Las pizarras magnéticas bien utilizadas son beneficiosas, los profesores que llevan mucho tiempo en la enseñanza ya alertan, por ejemplo, sobre los resúmenes, porque se van perdiendo las habilidades para construir un texto de una manera correcta, bien cohesionado y estructurado, y hay que entender que estas habilidades solo se consiguen a través de la lectura. Incluso hay diferencias entre leer en papel y en formato electrónico, donde te distraes mucho más. Las estadísticas dicen que se lee más, si, pero de manera superficial, se escribe mas, sí, es verdad, pero de manera coloquial. Y una cosa muy importante, la ansiedad que crea la dependencia, por ejemplo, del móvil. Algunos de los profesores con los que ha trabajado han estado a punto de recibir agresiones por quitar el móvil a un alumno. En un caso el profesor le requisó el móvil a un alumno durante el fin de semana por su mala utilización y tuvo que soportar insultos por su negativa a devolverlo. Es necesario el autocontrol pero ojo, no solo los adolescentes, los adultos también necesitamos de el autocontrol aunque en el caso de los menores es una cuestión de los padres.