Triufé recuperó una de sus tradiciones más antiguas y levantó las figuras del mayo y la maya. Una costumbre desaparecida hace más de medio siglo por la pérdida de la población y el abandono de la actividad en el medio rural.

En este caso la costumbre era empinar la réplica de un mozo y una moza confeccionados con trapos y prendas viejas. Vecinos de Triufé y de Puebla han participado en revitalizar esta tradición que alguno de los jóvenes desconocía mientras que los mayores añoraban y para los niños completa las vivencias de la infancia. Unas costumbres longevas que se han mantenido en pueblos como Villanueva de Valrojo o Villardeciervos, donde es una tradición , o en Val de Santamaría, donde un mayo espanta la fauna junto a la nacional 631.