Los vecinos de Morales de Vino que se daban cita a las diez de la mañana en los aledaños de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción para marchar en procesión hasta la ermita del Cristo de Morales acompañando a la Virgen del Rosario en su tradicional procesión. En la ermita la esperan las autoridades civiles y eclesiásticas y cientos de devotos de la Tierra del Vino que pasan un nublado lunes de romería.

En la ermita esperaban a la comitiva el delegado territorial de la Junta, Alberto Castro, el teniente de alcalde de Zamora, Antidio Fagúndez y el alcalde de Benavente, Luciano Huerga. Por primera vez no estaban invitados ni la presidenta de la Diputación ni el subdelegado del Gobierno, según denunció el PP.