En la tarde de ayer, se reanudó la quinta edición del bolsín taurino Tierras de Zamora con la segunda semifinal que se tuvo que suspender el pasado 10 de abril por las inclemencias del tiempo y que tenía que dar los finalistas para el próximo domingo en Toro.

En la plaza terracampnia se celebró, pues, con un gran ambiente taurino, como no puede ser menos en la cuna de toreros como Andrés Vázquez y Luis Miguel Villalpando, ambos presentes en el coso de la villa al igual que el ganadero Antonio Boyano o su hijo, así como otros profesionales del toreo como José Luis Bote o el portugués Julio Andrade. Igualmente, estuvo el matador zamorano en activo Alberto Durán, que ayudó en las labores de parar y poner las vacas en suerte dejando ver la clase y el gusto que atesora, lo mismo que la colaboración del banderillero Daniel Ayuso y el picador vallisoletano Javier Bastida. Los tres ayudaron a que el festejo tuviera la calidad que se precisa en la primera parte de la tienta.

El ganado, de Cantoblanco aunque con el yerro de Miranda de Pericalvo, tuvo de todo, pasando desde la extraordinaria y brava vaca primera que fue muy aplaudida por los espectadores, tanto por su entrega en el caballo como por su bravura en la muleta, hasta la quinta, muy bien toreada y puesta en suerte en el caballo por el picador. La segunda y la cuarta fueron las de menos calidad, esta última apenas dejó lucirse a los jóvenes que se tuvieron que enfrentar a ella.

Entre los diez aspirantes a la final faltó el salmantino David Salvador, que hoy toreaba en Francia y fue sustituido por el mexicano José Miguel Arellano Lamas, al que se le vio con buenas maneras, sobre todo en la última tanda de muletazos con la izquierda en la última vaca. Sin duda alguna, lo mejor de la tarde corrió a cargo del sevillano Fernando "del Rocío", que dio un recital de bien hacer toreando con mucho temple en su primera intervención, tanto con la derecha como con la izquierda, como con los remates en su segunda entrada. Bien es cierto que contó con la inestimable ayuda de esa brava y codiciosa vaquilla. También el sevillano Jesús Cuesta estuvo a buena altura, sobre todo en su toreo con la mano derecha en redondo.

El madrileño Álvaro Martín, de la escuela Marcial Lalanda, también estuvo muy en torero y se le ve más que preparado realizando un trasteo con mucha cabeza, pero tal vez un poquito frío, como demostrando que esa actuación era muy fácil para él. En esta misma tercera vaquilla el sevillano Daniel de la Fuente, de la Puebla del Río, estuvo de menos a más, una primera serie sin apenas entendimiento con la vaquilla y una parte final de mucho temple y gusto.

En la segunda vaquilla esperábamos más del joven Javier Sánchez, de la Escuela Taurina de Medina de Rioseco, al que le vimos un poco envarado y donde lo más aceptable fueron unos redondos invertidos, pero sin acoplarse a una vaquilla que se repuchó en el caballo pero que sirvió para torearla en la muleta. En la cuarta, tanto Alejandro Rodríguez, de Madrid, como Ángel Téllez, también de la capital, se enfrentaron a la menos lucida de las vaquillas, aunque lo intentaron, apenas pudieron lucirse.

En los próximos días la organización dará cuenta de los diez finalistas que se jugarán el premio en la final del próximo domingo, 8 de mayo, en el coso de la ciudad de Toro.