El sector ganadero sayagués vivió ayer una nueva convulsión a consecuencia de un ataque de lobos, en Abelón, que se saldó con la muerte de una docena de animales. El suceso tuvo lugar a pleno mediodía y en una cortina distante del pueblo solo medio kilómetro, a donde había sido desplazado al ganado hacia las 14.30 horas. El predador perpetró su acción mientras la gente comía o descansaba tranquilamente en sus casas. A las seis de la tarde el ganadero y el pueblo se sorprendieron con la escabechina sufrida por el titular de la explotación, Jesús Leal, que ayer mostraba un sobresaliente enfado, compartido por todos los ganaderos de la zona. Fuentes locales afirman que una vecina del pueblo vio al depredador saltar por encima de una de las cortina.

En el momento del ataque el hatajo estaba formado por un centenar de animales, según informó la mujer de Leal, Milagros Rodríguez. La Guardia Civil y los agentes forestales se presentaron para certificar la matanza y la autoría de la misma.

"Las ovejas que permanecen vivas están espantadas, y la solución es que no existan lobos por aquí. Las ovejas comen la mayor parte del año de la pila y ahora, que pueden comer del pasto del campo no las podemos dejar solas porque mira lo que pasa. La gente está muy disgustada" afirmaba ayer Rodríguez. El reguero de animales muertos dejados por el lobo en la cortina despertó el interés de la población y, especialmente, de los ganaderos que se prestaron a echar una mano al perjudicado.

La lobada viene a sumarse a un reguero de ataques llevados a cabo por los cánidos en la zona y en un momento en que está en marcha, por parte de la Asociación del Bajo Duero (Abaduero) una campaña de recogida de firmas para reclamar que Sayago quede "libre de lobos". Incluso se pide que cese el intento de perpetuar el lobo al sur del Duero, siquiera como especie cinegética, que es lo que reclama la Junta de Castilla y León ante Europa.

Otra de sus exigencias choca de lleno con las medidas esgrimidas por Administración y colectivos ecologistas y conservacionistas por cuanto que rechazan la entrega de mastines, las ayudas a los vallados y el pastoreo por entender que "son ineficaces e inviables con la ganadería extensiva". No obstante, Abaduero siempre se ha mostrado contrario al exterminio del lobo, que consideran debe mantenerse en otros escenarios más adecuados.

El problema del lobo es una cuestión de primer orden en Salamanca. Precisamente ayer, e delegado territorial de la Junta de Castilla y León en Salamanca, Bienvenido Mena, y el presidente de la Diputación de Salamanca, Javier Iglesias, trasladaron a los alcaldes el compromiso de ambas administraciones de proteger al ganado de la zona de Arribes del Duero, ante los continuados ataques del lobo, según informó la Diputación de Salamanca y recogió la agencia Ical. Ambos mandatarios recogieron las sugerencias de los alcaldes y les mostraron su apoyo y comprensión ante el malestar generado por los reiterados ataques. En ese sentido, se insistió en que desde la Junta existe el compromiso de poner en marcha todas las medidas encaminadas a proteger el ganado de los ataques de lobo, actuando siempre de acuerdo con la normativa vigente, una normativa que es de obligado cumplimiento para todos los países miembros de la Unión Europea, ya que el lobo no es una especie cinegética al sur del Duero.