Entrala se recupera de un intensísimo fin de semana de jolgorio, asueto y convivencia vecinal vivido con motivo de las fiestas de "Pasquilla", que llegaron a su momento álgido el domingo con una suculenta comida de hermandad que degustó todo el pueblo, para terminar con la tradicional carrera de la rosca por la cuesta del Barrero, la mejor forma de quemar las calorías.