Ecologistas en Acción (EA) ha presentado un recurso ante el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, por la negativa del director general de Calidad y Sostenibilidad Ambiental, José Manuel Jiménez, de elaborar los preceptivos planes de mejora de la calidad del aire para reducir el exceso de ozono en la Comunidad, que afecta a un tercio de la población que vive en la comunidad, según este colectivo.

La organización ecologista indica que el 1 de marzo Jiménez comunicó que no está dispuesto a aprobar los planes de calidad del aire que exige la normativa en zonas donde, entre 2013 y 2015, se ha incumplido el objetivo legal de protección de la salud establecido legalmente para el ozono.

La negativa, según añade, se produce pese a reconocer que en las zonas Duero Norte, Montaña Sur, Valle del Tiétar y Alberche, así como Soria y Demanda, con una población de 790.000 habitantes repartida entre todas las provincias de Castilla y León, se ha superado dicho valor objetivo en el trienio 2013-2015. EA hace además extensible ese "incumplimiento" a Salamanca y Valladolid, que suman otros 560.000 habitantes.

Los ecologistas, que se quejan de que la Junta se ampare en la "muchas incertidumbres" sobre el comportamiento de este contaminante y traslade la responsabilidad al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama), advierten de que en Laguna de Duero (Valladolid), Venta de Baños (Palencia), Segovia, Muriel de la Fuente (Soria) y Valle del Tiétar (Ávila) se ha superado en el último trienio el objetivo legal de ozono más de 25 días por año de media.

La Ley estatal de Calidad del Aire establece que las comunidades autónomas han de adoptar planes de mejora para alcanzar los objetivos establecidos en las zonas en las que los niveles de uno o más contaminantes regulados superen los objetivos establecidos.

Se trata, según destaca Ecologistas en Acción en un comunicado, de una medida obligatoria para las autoridades autonómicas, "que de ninguna manera se puede entender como una decisión discrecional y es independiente de las iniciativas que pueda adoptar el Gobierno central".

El ozono troposférico, también conocido como ozono "malo" por contraposición al de la estratosfera, es un contaminante secundario producido por la reacción entre la luz solar y el dióxido de nitrógeno y los hidrocarburos emitidos por los automóviles y algunas industrias.

Por inhalación el ozono troposférico provoca, según EA, un incremento del riesgo de enfermedades respiratorias agudas y reducción de la función pulmonar, así como el agravamiento de patologías cardiovasculares.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima en 1.800 los fallecimientos prematuros anuales en España producidos como consecuencia de la exposición a niveles de ozono, siempre según datos barajados por Ecologistas en Acción.

Además de ser nocivo para las personas, los ecologistas alertan de que este es también tóxico para la vegetación, pues daña los bosques y los parques urbanos y reduce la productividad de los cultivos.