"Hemos vivido los momentos previos, en esta preparación de cuaresma donde nos hemos preparado para lo que está por llegar, todo son ajetreos, prisas, caperuces, túnicas, olor a naftalina, aceitadas, almendras garrapiñadas, y al cíngulo de la túnica de la Congregación que mi madre siempre decía que olía a vaca; asambleas, reuniones, triduos, todas estas cosa y muchas otras pasan durante la cuaresma y que anuncian que ya estamos cerca. Estamos a solo cuatro días de que el Mozo cruce el puente para que empiece la pasión en la Capital y a una Semana de que la entrañable borriquita abra la Pasión de Villaralbo".

Juan Manuel Bragado, presidente de la Banda de Cornetas y Tambores de Villaralbo y de la cofradía de Jesús Triunfante de la misma localidad, amén de semanasantero de pro también en la capital fue el encargado, ayer, de pregonar una de las manifestaciones de la Pasión que mejor evolución ha tenido en los últimos años en el entorno de la capital.

Bragado construyó el pregón sobre dos pilares fundamentales: su vinculación personal y familiar, desde pequeño a la Semana Santa y la descripción de los desfiles en Villaralbo. El estreno de ropa nueva que la madre le ponía el Domingo de Ramos, los pantalones cortos para ir en busca del ramo de laurel, la primera comunión que habría las puertas de la Cofradía "de la que mi padre fue fundador y que lleva en el alma, sentimiento que también me transmitió a mí" fueron recuerdos de niñez que fueron pasando por el pregón. Como la primera salida "con mi túnica nueva de raso morado para acompañar al Nazareno de don Ramón Álvarez y poder hacer así mi primera procesión junto al Nazareno, que por aquellos entonces salía a hombros en la antigua mesa de la Soledad de Zamora".

Y a medida que iba creciendo el pregonero iba desarrollando sus inquietudes, la "loca idea" de crear una banda de tambores a finales del 96 para que acompañara al Nazareno. "Al hacerme mayor, mi fe y mis sentimientos mi hicieron fijar en una pequeña Cofradía que pasa casi desapercibida, pero a la que le tengo mucho cariño, que no es otra que la Cofradía de la Santa Cruz.

También en un instrumento que creía faltaba en mi vida, y ese no es otro que la Corneta, mi compañera inseparable, ya que 20 años llevo en la banda y 16 besando el aire con ella; mi compañera fiel y es que aunque suene mal decirlo, le dedico más besos a ella que a mi muy amada esposa". En este caminar de los años, junto a la Banda "nos faltaban aún proyectos por culminar, como una nueva Cofradía de Jesús Triunfante o ese Cristo Yacente que con cariño y devoción trajimos desde Huelva, hasta haber llegado a ver convertida la Banda en lo que es a día de hoy, y de muchos y futuros proyectos que poco a poco iremos plasmando por nuestra siempre bien querida Semana Santa".

En la segunda parte del pregón Bragado se dedicó a ensalzar la Semana Santa de su pueblo. El Domingo de Ramos, los niños de hebreos, "túnicas de raso rojo y blanco, junto con palmas color oro que brillan a la luz del sol que abre esta hermosa mañana". Es "la ilusión de los más pequeños (...) mi Cofradía favorita, la Cofradía de los niños, la Cofradía de mi hija". Llega el Jueves. "Lejos quedan ya aquellas tardes de Jueves Santo, que a voz en grito, los monaguillos salíamos pregonando: "A la carrera y al Sermón, que a las ocho y media hay procesión", agitando la matraca para pregonarlo a las gentes del pueblo. Hoy el Jueves Santo se presenta muy diferente, salen dos Cofradías, la de la Santa Cruz, con más de 300 años de historia, y la de Jesús Nazareno, ese precioso Nazareno que da nombre a nuestra banda". Es una tarde que "se tiñe de púrpura y amarillo", en un desfile que abre Banda de Cornetas, tras ella, el pendón y el Cristo del Nene, acompañados de la Santa Cruz, el Nazareno de Ramón Álvarez, el Cristo de la Agonía, y el Cristo del Santo Sepulcro.

El pregón reflejó también la procesión de la Cofradía de las Angustias. "La Santa Cruz y el Nazareno acompañan el desfile, aunque en esta tarde la protagonista sea ella, sus damas y hermanos, su dolor, su angustia".

Y por fin el Resucitado, con la Cofradía de Jesús Triunfante.

"Como siempre digo, cofrade se nace, pero también se hace", finalizó el pregonero.