Con ser el cebo de carne el sistema afianzado en la Reserva Regional de Caza de la Sierra de La Culebra, y fuera de ella, para citar al lobo a la muerte, no es fácil garantizar al cien por cien el resultado porque deben conjugarse otros componentes como acercarse al nido con tiempo y como un gato, guarecerse como reptil, saber guardar silencio como un muerto y tener la paciencia del santo Job. Paciencia y tiempo es lo que falta a muchos cazadores, que consideran que es llegar y besar el santo. Pero, sin duda, el lobo no escapa a los comedores sociales, como sucede con el jabalí y tantos comensales silvestres, aunque haya ejemplares que parecen leer los vientos y el paisaje y, con ello, salvar el pellejo. Coag lleva tiempo exigiendo que se permita estar al aguardo las 24 horas. El día y la noche.
