El Camino Mozárabe Portugués de la Ruta de a Plata fue y seguirá siendo parte imprescindible de las peregrinaciones desde Andalucía y Extremadura a la Catedral y la tumba de Santiago Apóstol en Compostela. Así lo creen los peregrinos que cada año recorren caminos de España y Portugal por él, pues discurre por ambos países, en Zamora por San Pedro de la Nave, Tierra de Alba y Aliste, para pasar luego a la región de Tras Os Montes.

La Asociación Zamorana de los Caminos de Santiago, consciente de la importancia de la variante portuguesa, va a tratar de recuperarla "estableciendo una infraestructura mínima para que los peregrinos encuentren lo necesario en cada jornada". Se da la circunstancia que desde Zamora capital hasta la frontera portuguesa en San Martín de Pedroso y Quintanilha hay tres albergues, pero ninguno de ellos cuenta con hospitalero que lo atienda como es debido.

José Almeida, presidente de la asociación Zamorana de los Caminos de Santiago, ya ha recorrido el camino para conocer de primera mano sus virtudes y deficiencias, marcándose como plazo antes de un año que el Portugués sea un camino "atractivo para el peregrino por todo lo que en él va a encontrar en su recorrido. Un camino prácticamente virgen que muchos desearán recorrer y conocer".

Una de las prioridades sería una gestión adecuada del albergue de peregrinos de Alcañices, uno de más grandes y mejor equipados de la provincia de Zamora, y dotarlo de hospitalero, para lo cual ya se han iniciado los contactos con el Ayuntamiento y con el alcalde de Alcañices Jesús Lorenzo. La experiencia del albergue tabarés en el Camino Sanabrés, a cargo de José Almeida, es una experiencia muy positiva que abre las puertas de la esperanza a una actuación con resultados similares en el albergue del bario La Atalaya de Alcañices.