La localidad de Moraleja del Vino da la bienvenida al año nuevo con una fiesta protagonizada por los quintos. Como es tradicional, los jóvenes asisten a la misa vestidos con la capa para dar después paso a la traca en la Plaza Mayor y continuar con la petición del aguinaldo por las calles. La fiesta se cerró con un baile, aunque solo es un punto y a aparte porque la víspera de Reyes los quintos vuelven a asumir el protagonismo y piden de nuevo el aguinaldo.