Dieciséis por dos metros es el espacio que ocupa el nacimiento que luce como todos los años en Madridanos, en uno de los salones municipales. Es José Luis Morales, natural de Moraleja y casado con una vecina de Madridanos, el encargado de ampliar el Belén navideño desde que tomara la iniciativa tras sentir el gusanillo del oficio de manos de su tío "muy aficionado, que vivía en Madrid me inculcó los primeros diseños". Y así, con el cúter y las placas de polispan José Luis ha dado forma a un poblado que gira en torno al Belén, con casas que echan humo por la chimenea al atardecer, animales que acompañan a los labradores, que se dedican a la trilla o representan quehaceres tradicionales introducidos al libre albedrío con los varales donde cuelgan la matanza, los pozos donde se surtían de agua antiguamente y la cascada con abundante agua merced al circuito cerrado que con una bomba capaz de mover seis mil litros a la hora. Cerca de un mes le lleva a instalación del nacimiento, con decenas de figuras para componer las distintas escenas a las que no les falta detalle. Será hasta víspera de Reyes cuando permanezca abierto al público en un año especialmente agraciado para su visita, pues el próximo 20 de diciembre, coincidiendo con las elecciones generales se celebrarán las votaciones en este mismo salón, con lo cual los votantes podrán apreciar el ingente trabajo de José Luis Morales.
