Una mujer de 63 años, vecina de Tábara, L. G. D. R. falleció ayer en un accidente de tráfico ocurrido a la entrada de Roales del Pan. El todoterreno conducido por su hijo, F. G. G., de 35 años que resultó herido leve, se salió de la vía por la margen izquierda chocando contra un contenedor metálico.

La víctima y su hijo se dirigían al Hospital Virgen de la Concha de Zamora después de que fueran derivados desde el centro de salud de Tábara. Al parecer habían acudido a los servicios de urgencias de la localidad porque el hijo no se encontraba bien y les mandaron al Hospital de Zamora. Nunca llegaron; poco antes de las ocho de la mañana el todoterreno Nissan Patrol que conducía F. G. G. se salió inexplicablemente de la carretera, cruzando hacia el lado contrario, hasta dar con el contenedor.

Ocurrió en el kilómetro 270, 760 de la carretera N-630, a la entrada de Roales, en una zona sin aparente peligrosidad y donde ya se lleva una velocidad reducida.

La sala de operaciones del 112 dio aviso del incidente a la Guardia Civil de Tráfico de Zamora y a Emergencias Sanitarias -Sacyl, que envió al lugar una UVI móvil y una ambulancia soporte vital básico. Una vez allí, los facultativos de Sacyl confirmaron el fallecimiento de la ocupante del vehículo y atendieron al conductor que posteriormente fue trasladado en ambulancia soporte vital básico al Complejo Asistencial de Zamora.

La nueva víctima mortal en las carreteras zamoranas viene a confirmar lo siniestro de un año para olvidar en la provincia. Más de veinte personas han perdido la vida en accidentes de tráfico, superando con creces las 14 víctimas del año pasado y las 8 con las que se saldó 2013.

El puente de la Inmaculada se ha saldado en la provincia de Zamora con tres víctimas mortales, dos en el accidente ocurrido la tarde del viernes, 4 de diciembre, en Burganes de Valverde; y la tercera, ayer por la mañana en Roales del Pan. Y otros dos heridos leves, uno en cada uno de los accidentes. La tendencia es similar en Castilla y León, donde los siniestros se han incrementado en los once primeros meses del año un 25 por ciento, hasta alcanzar las 135 víctimas mortales, 27 más que las 108 registradas en el mismo periodo del pasado año. En el conjunto de España las cifras apenas han variado de un año a otro.