Los pueblos de Aliste, Tábara y Alba se han quedado completamente a oscuras esta tarde durante 15 minutos en protesta por el cierre de la brigada comarcal de averías de Iberdrola que existía en Alcañices hasta que la empresa la desmanteló hace unos días.

A las nueve menos cuarto, en cada pueblo el alcalde, alguacil o un electricista desconectaba el alumbrado público y los edificios municipales, y lo mismo hacían los vecinos en sus casas y los empresarios en sus negocios. Con este acto simbólico, los habitantes de la Raya demandan un suministro energético eficaz, sin cortes ni averías, y con un servicio de cercanía implantado en la comarca.

En las imágenes que acompañan a esta información, se pueden ver las calles de Figueruela, San Vitero o Alcañices sumidas en la oscuridad