El Parque Natural Lago de SanabriaParque Natural Lago de Sanabria del y alrededores ha superado en 5.000 visitantes el número de visitantes que recibió durante todo el año 2014, según los datos ofrecidos por la Consejería de Fomento y Medio Ambiente. Más de 600.000 personas visitarán el Parque en 2015, recuperándose los datos positivos de visitas en 2012 y 2013.

En cuanto a la época en la que se producen las visitas al Parque Natural del Lago de Sanabria, éstas se han desestacionalizado y se producen más allá de los meses de verano. Los datos de turismo en Sanabria proporcionados por el Servicio de Medio Ambiente concluyen que se ha producido un aumento de más de 34.000 visitantes en invierno y primavera. Estos visitantes vienen atraídos por la oferta de sendas y rutas del Parque y la rica gastronomía comarcal.

Además, la reciente apertura del Centro del Lobo Ibérico de Robledo atisba un futuro también positivo, con un incremento de visitas en la comarca de Sanabria y la Sierra de la Culebra. Hasta el 22 de noviembre, en un mes y medio desde la apertura, han visitado el Centro 5.500 personas.

De esta manera, con la intención de seguir trabajando por el turismo y el desarrollo de los espacios naturales de la Comunidad, la Junta de Castilla y León aprobaba la semana pasada la ampliación en diez hectáreas de los límites del Parque Natural del Lago de Sanabria, incluyendo la totalidad de Porto y parte de los términos municipales zamoranos de Cobreros, Galende y Trefacio. Además, la medida establece su régimen de protección, uso y gestión con la finalidad de disponer las medidas necesarias para garantizar la conservación de este enclave.

En este sentido, la ampliación de los límites y el establecimiento del régimen de protección, tiene como objetivo prioritario conservar y proteger los ecosistemas, paisajes, valores naturales, hábitats, flora, fauna, modelado geomorfológico y procesos ecológicos del Parque Natural del Lago de Sanabria.

A su vez, se busca preservar su biodiversidad manteniendo u optimizando la dinámica y estructura de sus ecosistemas entre los que destacan sus singulares humedales relacionados con el glaciarismo de alta montaña como lagunas, turberas o arroyos nacientes, así como, promover la preservación de la identidad paisajística del espacio natural, velando por mantener o recuperar su calidad visual y funcionalidad ecológica.