El Instituto de Restauración y Medio Ambiente de León realizará un estudio minucioso sobre la Tricholoma josserandi (venenosa) y la Tricholomna portentosum (comestible) en Aliste tras el miedo suscitado entre los recolectores y consumidores, dado su parecido, lo que ha llevado incluso a no recolectarse la buena por miedo a intoxicaciones con la mala. La temida Josserandii no se había hallado hasta 2014 en el "Monte Terneros" de Sejas y este otoño ha vuelto a ser descubierta por los Agente de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León en pinares de Alcorcillo, lugar hasta donde se desplazo ayer en la primera visita de campo el ingeniero agrónomo y micólogo Juan Antonio Sánchez, acompañado del agente forestal Domingo Ferrero Cruz. Mientras que en Terneros, zona arrasada por el fuego de Latedo, la Josserandi estaba muy extendida compartiendo el hábitat con la Carbonera, en Alcorcillo se halló sólo en un pequeño corro donde, en teoría, no aflora la Portentosum. Aun así todas las precauciones son pocas para evitar graves riesgos.
En cuanto a la finalidad del proyecto Cibabol en si es "desarrollar un know how para producir en vivero plantas de jara micorrizadas con Boletus edulis e inoculadas con MHB que permita la supervivencia y fructificación de la "micorriza" una vez trasplantadas.
