La localidad de Sejas de Aliste se convertía ayer, por méritos propios, en el alma de la castañicultura y de la gastronomía de la Raya con la celebración de un magosto popular que hizo las delicias de todos los vecinos y cientos de visitantes de todas las edades, con la degustación de las castañas como uno de los principales atractivos culinarios que consiguió dejar satisfechos hasta a los más exigentes paladares.

Mientras la OMS pone en entredicho los productos cárnicos del mundo, zamoranos y trasmontanos demostraron en Sejas, por si alguien aún lo dudaba, que "las carnes producidas en tierras alistanas son exquisitas y muy saludables", como aseveraban los comensales degustando el guisado de carne fresca de la marca de garantía Ternera de Aliste, 120 kilos, con patatas de La Ribera y castañas de El Castro, que formaron un maridaje perfecto entre productos agroganaderos y los frutos silvestres del bosque alistano. "Todos hemos comido carne y chorizo durante toda la vida y aquí nos tienes, a cualquier pueblo que vas la mayoría pasamos de los ochenta y noventa años" aseveraba Joaquín.

Concurso de postres

Una convidada popular que tuvo el broche de oro con la degustación de los magníficos pasteles a base de castañas, presentados al concurso. Muchos disfrutaron tanto admirándolos con la vista como al comérselos. La repostera ganadora fue María Gago Fernández, la plata fue para Laura Casas Plaza y el bronce para María García. El premio especial a la mejor presentación recayó en Oliva Faúndez Macho, que elaboró un hermoso pastel negro decorado con pellizos y hojas de castaño. En cuanto al concurso de castañas, las de mayor calibre fueron las presentadas por Manuel Lorience Teso, que juntó un kilo con tan solo 34 castañas.

Para los visitantes llegados desde ciudades, muy en particular para los más pequeños, llamó y mucho la atención el tradicional asado hecho por los hombres de Sejas agitando el asador sobre las coloridas llamas de la lumbre de ramas de jara y encina hasta darle a las castañas el color y el sabor adecuado para comerlas.

Como anécdota, el mal tiempo obligó a trasladar la celebración al entorno del centro social, tras 14 años encendiendo el lumbrón en la Plaza Mayor. La jornada tenía este año un valor especial, pues la asociación Amigos del Castaño y del Medio Natural cumplía 15 años de vida apoyando el cultivo de este fruto silvestre. La otra novedad de la jornada fue el I Cross de la Castaña, del que resultó vencedor Alejandro González Zarza, del Vino de Toro-Caja Rural en un reñido sprint con Jorge Rodríguez, del Atletismo Bañeza. La ganadora en femenino fue Flor Lamas del Atletismo León.

Los artesanos de la zona como Juan Antonio Bermúdez, de miel y Manuel Rivas Lorenzo, que comercializa castañas y derivados, demostraron con sus productos que "en Aliste tenemos cantidad y calidad".