Javier Faúndez Domínguez, como presidente de la mancomunidad "Tierras de Aliste", puso voz al sentir unánime de los alcaldes. "Nos parecen denigrantes las declaraciones que se están haciendo por lo del lobo de Latedo por parte de la asociación Lobo Marley. Llevamos más tiempo hablando del trauma del lobo, -que lo sentimos-, pero apenas hablamos de los dos ganaderos que han perdido uno 9 ovejas y otro 21, ganado con el que viven y alimentan a su familias" y continúan los ediles "Parece que sentimos más la pérdida de un animal salvaje, -que ha recibido todos los cuidados y que no ha podido reintegrarse en la naturaleza-, que la desgracia que padecen todos los ganaderos que viven en un medio difícil con el que tienen que luchar a diario para sacar a sus familias adelante. Parece que nos preocupan más los animales salvajes, que las personas". Concluye que "la asociación Lobo Marley está inculpando a un ganadero de la muerte de ese animal no sabemos con qué pruebas. Si un pastor ve que un lobo se acerca a su ganado ¿Que va a hacer? "decirle que coja la oveja que quiera y que se vaya. Es de risa" aseveran.

Alcaldes y vecinos defienden que la relación con grupos de naturalistas que se acercan a la comarca es "muy buena", porque "las cosas todas tienen su camino", eso sí dejando clara la excepción con Lobo Marley y su presidente Luis Miguel Domínguez .

Los ganaderos manifiestan tener ya miedo. "Pastores, ganados y lobos siempre hemos convivido juntos. Es mentira que haya odio hacia los cánidos y la prueba está que hemos sobrevivido en el mismo ecosistema, juntos, que no revueltos. Somos pastores no salvajes".