Más de un centenar de personas participaron ayer en las labores del rastreo dispuesto para intentar encontrar a la mujer de 82 años, Lourdes Rodríguez Ramos, dada por desaparecida en Pedrazales desde la noche del pasado lunes. Al operativo, coordinado por la Guardia Civil, se sumaron vecinos de todo el municipio de Galende, Protección Civil de Zamora, Benavente y Puebla, agentes del Seprona, caballistas de la zona y motoristas, además de una unidad de Soporte Vital y concejales y operarios municipales de Galende.
La noche anterior fue difundido un bando pidiendo la colaboración para rastrear la zona, y la alerta se propagó rápidamente por las redes sociales encontrando una respuesta impresionante de gente dispuesta a tomar parte en la búsqueda.
Los equipos peinaron literalmente un radio de más de 5 kilómetros de terreno, desde el último punto en que fue vista la mujer, el paraje de El Capricho, de Pedrazales. Un radio que incluyó las dos márgenes de los ríos Tera y Trefacio aguas abajo hasta el Puente de Sanabria, a 5 kilómetros de Pedrazales. A las operaciones de rastreo se sumó un helicóptero de la Guardia Civil que desde las once de la mañana sobrevolaba el área de búsqueda, y la unidad Citológica de la Guardia Civil de Zamora. Bomberos del parque de Rionegro, que no estaban de servicio, se sumaron al operativo.
Las labores se iniciaron a las ocho de la mañana, bajo unas temperaturas que exigían cierto abrigo, con la concentración de todos los voluntarios en el punto donde fue vista por última vez, y la formación de varios grupos para ampliar el radio de búsqueda respecto al día anterior. Si el monte se había recorrido y escrutado con cierta minuciosidad el martes, la búsqueda de ayer abarcó los dos ríos principales de la zona y requirió la formación de equipos mixtos de Guardia Civil, Protección Civil y voluntarios conocedores de la ribera, pescadores ribereños en su mayoría que conocían los entresijos de un río que desciende, por estas fechas, un tanto embravecido.
Los cinco kilómetros de cauce del Tera se descendieron con importantes dificultades por los tramos abruptos de la morrena central y agravado por el caudal del río crecido por las lluvias, aunque ayer ya había bajado ligeramente su nivel casi en medio metro. La zona de rápidos de los Molinos presentaba un serio riesgo para los rastreadores, pero lo peor era el mal estado de las orillas, en numerosos tramos impracticables por la maleza y la falta de limpieza de los cauces y la proliferación de vegetación de ribera. Hubo zonas enmarañadas y de difícil acceso, donde resultaba imposible llegar a pie hasta el borde del río. Pese a ello la búsqueda fue pormenorizada e infructuosa. Más de dos horas llevó completar el peinado del río hasta El Puente de Sanabria. Un "negativo" por la emisora del agente responsable del grupo daba al traste con la posibilidad de encontrar cualquier indicio.
A última hora de la mañana uno de los equipos cerraba el rastreo con un minucioso recorrido por las cunetas de la carretera, desde Pedrazales hasta Trefacio, buscando cualquier objeto que hubiera pasado desapercibido, especialmente cristales que delataran un posible atropello.
A lo largo de la mañana, agentes de la Guardia Civil revisaron la última casa de Pedrazales junto a la carretera a Trefacio, aunque con resultado negativo de la presencia de la octogenaria. Su hija, Lourdes, aguardaba noticias de la búsqueda mientras esperaba la llegada de más familiares desde Barcelona, donde reside habitualmente Lourdes Rodríguez Ramos.
Las vecinas intentaban reconfortar a la hija de la desaparecida tras dos noches sin noticias de su paradero. Tras la extraña desaparición, ya que no hay ningún rastro de la mujer, no se descartaba ninguna hipótesis, entre ellas que se hubiera subido involuntariamente a un vehículo, la desorientación u otras posibles causas que pueden darse en personas de avanzada edad. A las dos de la tarde se hacía un alto para reponer fuerzas y reanudar la búsqueda una hora más tarde.
Poco después de las siete y media de la tarde finalizaba el segundo día de búsqueda sin resultados positivos.
Un dispositivo de la Guardia Civil se ha mantenido todas estas noches de vigilancia en Pedrazales por si surge alguna novedad.
El alcalde del municipio, José Manuel Ramos, se sumaba ayer a las labores de seguimiento y confiaba que le operativo de búsqueda se prolongue unos días más.
El radio de búsqueda se ampliaba en las últimas horas hacia la zona de Vigo y Murias, así como a la red de caminos rurales de todo el entorno de Pedrazales. La Guardia Civil ha rastreado en la estación de tren y en los autobuses de línea de la comarca por si hubiera adquirido algún billete, aunque el resultado también ha sido negativo.
Las labores de búsqueda se reanudan hoy a partir de las ocho y media de la mañana en el alto de Pedrazales.
