Seguramente la mujer que fue agredida el lunes por su expareja en Morales del Vino "sufría en silencio el acoso de su ex compañero que en muchas ocasiones posiblemente le habría dado muestras de ser maltratador, pero no quiso denunciar nunca. Si hubiera tenido ayuda por algún vecino, por un familiar o por cualquiera de nosotros quizá se podría haber evitado la agresión. Por eso insisto en que los vecinos nos impliquemos en algo tan importante como es la lucha contra la violencia de género". Así lo expresa Clara San Damián, coordinadora regional de la Unidad de Violencia de Género de la Delegación del Gobierno, quien ayer asistió a la concentración promovida por el Ayuntamiento de Morales del Vino para expresar con contundencia el rechazo a la violencia de género. Con un minuto de silencio escenificaban los moralinos tolerancia cero y su condena rotunda a la agresión que se produjo en el pueblo el pasado lunes, que mantiene todavía ingresada en el hospital a la víctima, una mujer de 76 años, que evoluciona favorablemente, con pronóstico reservado.

San Damián insistió en la necesidad de trabajar en la prevención y educación de los más jóvenes que "reproducen pautas que ponen de manifiesto que asumen con normalidad que sus parejas practiquen sobre ellas control y violencia, sobre todo psicológica".

A día de hoy hay 33 víctimas nacionales y los tres últimos casos de estos días aún no están contabilizados. Si se confirman, como parecen, tendríamos que añadir cuatro, dos de ellos en Castilla y León en 24 horas, y estaríamos hablando de 37 casos de violencia de género en el 2015.

A mediodía y a las puertas del Ayuntamiento se reunían decenas de vecinos, al igual que lo hacían representantes de distintas asociaciones del pueblo como el Club de Jubilados, Asprosub, trabajadores del Ayuntamiento y parte de la corporación de Morales del Vino, con el alcalde, Miguel Ángel Piorno, presidiendo el acto. Piorno expresó en nombre de la Corporación "el rechazo a los hechos ocurridos en esta localidad, que es un pueblo tranquilo. Nos ha sorprendido a todos. Pretendemos acompañar a los vecinos, e insistir en que se denuncien hechos de esta naturaleza". El Ayuntamiento de Morales del Vino estudiará algún tipo de reconocimiento a las dos personas que mediaron durante la agresión, poniendo en riesgo su integridad física e impidiendo que las puñalada fueran mortales. Se trata de la vecina Tránsito Peña, que acompañaba a la víctima antes de la agresión y el guardia civil Antonio Campos, que redujo al agresor.

En la concentración se encontraba también la presidenta de la Asociación Zamorana contra la Violencia. Mila Rueda, su presidenta, explicaba que desde la asociación se ha ofrecido a la víctima y familiares asistencia y asesoramiento. "Ha sido una grandísima suerte que el censo de mujeres asesinadas durante esta semana no se haya incrementado con la mujer de Morales del Vino". Por parte del concejal de Servicios Sociales en el Ayuntamiento, Fernando Castaño, se anunciaba que trabajarán en la dirección de proteger a las personas en riesgo de violencia de género. Por su parte, José María Barrios, ex alcalde y portavoz de la oposición en el Ayuntamiento, contaba cómo en Morales se programó, estando él como regidor, una charla contra la violencia de género "a la que no asistió nadie. Eso parece que pasa siempre en otros sitios, pero hay que ser consciente de que puede pasar en cualquier lugar o incluso en la propia familia".

Una vez concluido el minuto de silencio, los presentes aplaudieron, entre ellos Tránsito Peña, la mujer que intervino para tratar de impedir la agresión.