Propietarios de viñas de pueblos de la comarca natural de Aliste, Tábara y Alba exigen a la Junta de Castilla y León medidas urgentes que garanticen la seguridad de los viñedos ante los continuos ataques de los ungulados.
Los afectados aseguran que los productos "no están a salvo ni con vallas de metro y medio de altura, no sabemos cómo lo hacen pero saltan por encima". Es tal el numero de ciervos que campan fuera de los límites de la Reserva Regional de Sierra de la Culebra que los propietarios no dudan en manifestar que "una finca abierta es una viña perdida porque te la arrasan".
Son varios los agricultores alistanos que han presentado denuncias ante Medio Ambiente porque los ciervos le han comido todas las uvas de la viña.
