La Virgen de la Peregrina volvió ayer a reunir a los hijos de Donado y devotos de todo el contorno en una multitudinaria romería que abarrotó el santuario para rendir tributo a la patrona. Desde primera hora el templo recibía a los fieles, que llegaban con las flores a los pies de la Señora de Donado o encendían la vela para pedir protección a la Virgen, ayer especialmente engalanada.

"Donado acoge a todos fraternalmente a los pies de la Madre Peregrina". La bienvenida a las puertas del santuario es una muestra de la hospitalidad con la que este pueblo carballés recibe a todo el mundo en el primer domingo de septiembre para honrar a la Virgen enviada desde Oriente por Manuel Obelar siendo obispo en Indonesia.

Tras la misa en el templo, los devotos acompañaron a La Peregrina en la procesión por las calles de Donado, ayer convertidas en un gran mercado de puestos con todo tipo de artículos y productos de la tierra. Los pendones abrían el cortejo mientras la banda de gaiteros de la Alta Sanabria, As Portelas, ponía la nota musical a lo largo del recorrido.

La celebración religiosa se complementa con un día de mercado donde los asistentes a la romería se pierden entre las decenas de puestos que pueblan los alrededores del santuario.