La ganadería de ovino de los hermanos Pablo e Isidro Antón Codesal de Cerezal de Aliste ha sufrido una nueva lobada que se ha saldado con tres ovejas adultas muertas de la raza autóctona Castellana. El ataque se produjo en la tarde del pasado jueves en una zona del pueblo de robledal y pastos. Los ganaderos no echaron de menos las ovejas hasta la mañana de ayer, saliendo en su búsqueda hacia la zona donde habían estado pastoreando el día anterior. Allí encontraron los restos de las reses que los técnicos de Medio Ambiente han certificado. La manada de lobos ibéricos localizada en el Bajo Aliste, por la zona de Sierra Gorda, está siendo una de las más activas en cuanto a ataques durante los últimos meses, muy en particular en los rebaños existentes de Bermillo de Alba y Cerezal de Aliste, donde ya se han dado varios ataques, entre ellos a los rebaños de los Antón Codesal. La pasada semana los ataques de lobos tuvieron lugar en las localidades de Santa Ana y Villarino Tras la Sierra, próximos a la Raya con Portugal, donde los cánidos mataron una oveja en cada caso.