El incendio declarado el sábado en Peque afectó a 6 hectáreas de matorral y 1,50 hectáreas de pasto. Pese a no haber surgido en un bosque, la Junta llevó a cabo un gran despliegue de medios por su cercanía a las viviendas y el fuerte viento que corría esa tarde. Las circunstancias meteorológicas hacen posible que se reactive, por lo que ayer a última hora de la tarde permanecía en el lugar un agente con una autobomba, pese a llevar controlado desde el domingo.