Villaflor, tan bonito como acogedor pueblo, volvió a convertirse en la noche del jueves al viernes en la capital de la fiesta de la Raya. Alegría, participación y diversión sin límites gracias a su magnifica y sabrosa oferta gastronómica y verbenera abierta tanto a los vecinos habituales de la localidad y emigrantes como a los foráneos. Sólo 18 personas figuran en su padrón, todos jubilados, sin embargo los festejos veraniegos han obrado el milagro y más de mil personas abarrotaron su calles, muchos de ellos niños y jóvenes convirtiendo las fiestas en días de convivencia y hermandad a la vez que de intercambio intergeneracional. Tal fue la influencia que no cabían los coches en el pueblo.

Los vecinos, con su alcalde Tomás Díez Domínguez, trabajaron duro, laboriosamente y con mucho calor, durante toda la tarde para preparar la convidada popular. La leña de encina ardió y las llamas fueron dando paso a las rojas brasas sobre las que, sobre grandes parrillas, la carne y el chorizo fue adquiriendo su color y sabor, impregnando el ambiente con un olor a gloria, que gloria, más terrenal que bendita, son los manjares culinarios de la tierra. Los comensales, con los estómagos llenos y agradecidos, alababan la labor: "Villaflor es un gran pueblo, muy buena organización y muy buena merienda". Mil raciones se hicieron y mil se repartieron, no quedo nada.

Antes, durante y después, los integrantes del grupo "Los Campusinos" de Villalcampo, pusieron la música de dulzaina, tamboril y bombo para que los festajeros, muy en particular los mayores, se atrevieran con el baile al ritmo de los pasodobles. Ayer viernes continuaron los festejos con el concurso de dibujo, la gymkana por los alrededores del pueblo, una divertida guerra del agua, tute, hinchables para los niños y merienda infantil. El teatro lo puso la compañía Fantasía representando la obra "¡Ay que solo me dejas!". La orquesta Estribo animo la verbena hasta altas horas de la madrugada. Del jueves hay que destacar también la elección de Miss y Mister Villaflor y la segunda edición de "Tu Cara Me Suena Villaflor", este año dedicada "Eurovisión", donde los jóvenes se lo pasaron en grande. Este año por primera vez se dio pregón a cargo de Bienvenido Lorenzo, maestro e hijo de Manuel, "El ultimo Barquero".