Los naturalistas de Lobo Vivo piden que el lobezno rescatado el pasado domingo por los agentes medioambientales, en la zona calcinada del pinar de la Raya, y que se recupera de las quemaduras sufridas en sus extremidades, sea reintegrado a la naturaleza "lo más pronto posible". "Lo primero de todo es que no haya impregnación, que esté en contacto con los humanos lo menos posible, y que sea puesto de nuevo en libertad", expresó ayer Luis Miguel Domínguez.

El rescate de esta criatura ha trascendido a todas las esferas y la suerte de su destino es una cuestión que también tiene en vilo a muy diferentes colectivos. Lobo Vivo señala que "puesto que los agentes forestales tienen localizada a la manada, y saben donde están los padres y la familia, lo que procede es volverlo a reincorporar a la naturaleza". Domínguez añade que el Centro Temático del Lobo, de Robledo, "es un lugar para exhibir", y se reafirma que el cánido debe reincorporarse "al campo". Reconoce, empero, que "el trabajo de curar las quemaduras del animal es una tarea muy sensible y delicada, pero no es ni mucho menos imposible que vuelva con los suyos". "Este animal antes de que acabe el verano tiene que estar con la familia. El lobo es muy social y, sabiendo donde están los progenitores, por esta vez la Junta de Castilla y León debe controlar la manada y no matarla para que el animal vuelva con la familia".

"El centro es desde el punto de vista una fachada pero, en el fondo, lo que se quiere es exhibir. La gran diferencia está en no convertir el lobo en un animal de zoológico y conseguir que siga libre y salvaje, como era" manifiesta Domínguez.

El naturalista afirma que "poco podemos hacer", y considera que "es una gran responsabilidad de la Junta de Castilla y León hacer su trabajo correcto". En su criterio, "que los agentes sepan de la familia da esperanza", y reitera que "lo prioritario es curar el animal, seguir contando con la manada, y volver a reincorporarlo a la zona". Sostiene que "es un lobezno con capacidad de entrar en la naturaleza. Debe hacerse todo menos convertir el lobezno en un animal de zoológico. Si se impregna, dependerá de los humanos".

Para Luis Miguel Domínguez la situación actual que atraviesa el lobato "es complicada", y asegura que "de ser una especie protegida y no cinegética tendría un tratamiento diferente". No obstante, subraya que "es una especie esencial de la provincia de Zamora". El lobezno sigue su proceso de curación en el Centro Temático de Robledo.