La superficie afectada por el incendio que el domingo por la tarde amenazaba a la localidad de Cabañas de Aliste seguía en perimetración por parte de los efectivos de la Junta ayer al cierre de esta edición, según informó Medio Ambiente, que todavía no había declarado el fuego completamente extinguido. En la zona se encontraban dos cuadrillas de tierra, un celador, tres agentes medioambientales y un técnico vigilando que las llamas no volvieran a surgir, al tiempo que calculaban la cantidad de hectáreas arrasadas.

Además, el Gobierno autonómico ha prorrogado la alerta por riesgo meteorológico de incendios forestales en toda Castilla y León hasta el jueves debido a las altas temperaturas que se experimentarán estos días, acompañadas de noches en las que no refresca. A esta situación se une la probabilidad de que el viento aumente su intensidad y cambie con componente suroeste, que suele llevar aparejado un descenso de la humedad ambiental.