Todo el mundo tiene días malos en el trabajo, pero cuando eso sucede en firmas de arquitectura o de ingeniería los errores perduran en el tiempo y a veces causan calamidades a terceras personas. Es lo que le sucede a Justino García, natural de Cubillos y propietario de una finca agrícola en dicha localidad, a quien el Estado expropió una parte de la misma para introducir la vía del AVE, partiendo su parcela en dos. Avanzadas las obras, se encuentra con que una canaleta mal construida provoca inundaciones en su tierra cada vez que llueve, además de tener casi una hectárea cubierta de maleza seca a pocos centímetros de sus cultivos, una bomba que arrasaría su cosecha y la de sus vecinos en caso de incendio.
Junto a la finca de Justino García la vía del AVE Madrid-Galicia cruza un camino agrícola, por lo que se ha construido un paso elevado cuya ladera alcanza hasta seis metros de altura. El propietario denuncia que los responsables de la obra "han dejado crecer la maleza" en todo el terraplén y ahora hay "cerca de 8.000 metros cuadrados de cardos" junto a sus cultivos, una hierba que arde con facilidad y ahora en verano está totalmente seca, como puede se puede observar en la fotografía que acompaña a esta información, tomada hace un mes. García considera que "han plantado un foco de atracción de incendios, una colilla, un rayo o un cortocircuito en el propio tendido del AVE provocarían que la ladera ardiera en segundos. Están poniendo en riesgo no solo mi cosecha, sino las de las fincas contiguas".
Pero este propietario va más allá afirmando que no es un problema que le afecte solamente a él y a sus vecinos, "el trazado incluye decenas de pasos elevados, y cada uno es un punto de máximo riesgo para los incendios, suponen un peligro para la agricultura, que es la primera industria de esta provincia, y en Galicia o Sanabria también para la masa forestal, que es patrimonio de todos", explica.
Según el vecino de Cubillos existen otras plantas más propicias para este tipo de terraplenes, entre ellas varias gramíneas, y cita como ejemplo la agrostis stolonifera "que además de evitar el crecimiento de malas hierbas, al reproducirse mediante estolones ayuda a fijar el terreno y evita las escorrentías", argumenta.
Precisamente las escorrentías causadas por el desnivel de la ladera son la causa del otro problema que indigna a Justino García. En el paso elevado se construyó una canaleta para evacuar el agua de escorrentía "que no es operativa porque no tiene ninguna inclinación, y en cuanto hay un poquito de agua se desborda" -en la foto se puede ver la canaleta rebosante y la finca inundada- "se han gastado el dinero de todos para nada, es algo que demuestra falta de interés por hacer bien las cosas, hubiera costado lo mismo medir el terreno y hacer una canaleta que funcione", asevera.
La finca de este ciudadano de Cubillos se ha visto anegada en varias ocasiones a lo largo de los últimos meses, y a ambos lados de la vía, llegando a cubrir más de una hectárea de terreno en cada parte.
García ha enviado varios escritos a Adif para informarles de la inutilidad de su canaleta y los problemas que le genera, "pero no han puesto solución", asegura. En uno de sus primeros escritos reclamaba a la empresa pública 4.307,04 euros de compensación por los daños causados, era en marzo de 2014. A fecha de hoy, calcula, las pérdidas como consecuencia de las diferentes inundaciones superan ya los 17.000 euros. Ahora se plantea acudir también a la Defensora del Pueblo.
Curiosamente, la responsabilidad de las obras del AVE recae en última instancia en el Ministerio de Fomento, a cuya cabeza se sitúa una mujer de Cubillos del Pan, Ana Pastor Julián, de quien Justino García opina que "es una mujer muy responsable, seria, preparadísima y que trabaja bien". La ministra ha anunciado que antes de que termine el presente año la Alta Velocidad habrá llegado a Zamora, aunque la localidad de Cubillos está más al norte, y las obras hasta Vigo y La Coruña no estarán terminadas del todo hasta 2018,
