La escuela alistana de folclore de "Manteos y Monteras" ha cerrado el curso con un total de 268 matrículas, destacando las 102 de bailes tradicionales seguidas de las 61 de percusión, 40 de dulzaina, 30 de gaita de fole, 24 de pandereta y 11 de flauta y tamboril. El numero de alumnos se ha situado entorno a los 163 y la mayoría de ellos están inscritos a varias asignaturas. Se da el caso de algunos que asisten hasta a cuatro clases diferentes como sería el caso de Lidia Blanco Rodríguez de Matellanes y Adrián Romero Velasco de Lober,

Los alumnos y alumnas han llegado desde 30 pueblos diferentes, destacando la Villa de Alcañices donde se asienta la escuela con 70. El resto de localidades se sitúa ya a mucha distancia: Rabanales y Tola con 8 cada una, Grisuela con 7, Samir de los Caños con 6 y Matellanes, Fornillos y Bercianos con 5. De Portugal asisten 2 alumnos. El recambio generacional es vital para la supervivencia del folclore y las tradiciones, por ello es digno de destacar la presencia en las aulas de un total de 36 niños y niñas cuyas edades se sitúan entre los cuatro y los nueve años.

Los alumnos y profesores, liderados por Andrés Castaño Fernández y Ludi Domínguez Méndez, cerraron el curso con un festival folklórico en la plaza "Ferreras" de Alcañices donde mostraron el aprendizaje realizado a lo largo del otoño, invierno y primavera. Finalizados los actos los participantes fueron agasajados con una suculenta y sabrosa merienda ofrecida por el Ayuntamiento de Alcañices cuyo alcalde Jesús María Lorenzo Más estuvo presente en los actos: fue su primer acto como alcalde electo en la legislatura 2015-2019.