Nuestra Señora la Virgen de Fátima congregó este año en la localidad de Fradellos a sus fieles devotos, todos los vecinos del pueblo y otros llegados desde Riofrío, Rabanales, Dómez de Alba, Bercianos, San Vicente de la Cabeza, Valer, Campogrande, Mellanes, Grisuela, Tolilla, Gallegos del Río y Lober. Los devotos cumplieron una vez más con la tradición de rezar el rosario en pleno campo, -con el sacerdote Teófilo Nieto-, para luego salir en una emotiva procesión por la era cercana al casco urbano entonando los rezos y tradicionales cánticos propios del histórico trece de mayo rememorando la aparición mariana a los pastorcillos portugueses Francisco, Lucía y Jacinta.

La historia de la romería de Fátima ha cumplido esta primavera cuarenta años de vida. Fue en un ya lejano 1975, cuando siendo párroco del pueblo Plácido Isidro Alvarez, dos hermanos religiosos naturales de Fradellos, Vicente y Julián Martín González, coincidiendo con las bodas de oro matrimoniales de sus queridos padres, dos agricultores y labradores alistanos, Isidoro y Luisa, -hoy ya fallecidos-, decidieron invertir sus pequeños ahorros en construir un pequeño y sencillo santuario a la Virgen de Fátima, de la que eran fieles devotos. El recinto fue renovado allá por el año 2001 por la propia familia Martín González y por el pueblo de Fradellos, y ya en 2011 mejorado con ayudas de la Unión Europea a través del programa de desarrollo Leadercal que gestiona Adata con el apoyo del Ayuntamiento de Rabanales. Ahora el recinto religioso cuenta con un acogedor entorno: se hizo una explanada frente a él, adornada con flores y con varios olivos que embellecen la ermita campestre y romera.