La Asociación Textil de Castilla y León clausuró ayer la primera edición del Mercado de Diseño y Artesanía, celebrada este fin de semana en Puebla, con el propósito de organizar una nueva cita con el público sanabrés.
El vicepresidente de Atecal, Santiago García, subrayó el "esfuerzo" que han hecho diseñadores, artesanos y modelos en estas dos jornadas para ofrecer al público sus colecciones de diseño y complementos al público de la comarca y los visitantes que este puente se han desplazado hasta la comarca.
El colectivo del diseño ha tenido que adaptarse a la caída de ventas como consecuencia de la crisis, además de diversificar su participación en ferias y citas de moda. Ajustar precios y adaptar los modelos a los clientes son algunos de los cambios del sector, con ese valor añadido de lucir una prenda exclusiva.
La jornada matutina arrancó con una divertida propuesta de mimo a cargo de la monitora María Turiño de Milanatura, que mantuvo en vilo a los más pequeños, atentos a los juegos y las canciones. Tras el entretenimiento el público tuvo varias horas para recorrer los puestos y mirar más que comprar. Unas compras que fueron desiguales aunque la diversidad de productos la oferta era amplia. Por la tarde el número de visitantes aumentó a medida que se acercaba la hora de clausura.
A última hora los visitantes pusieron más interés por efectuar las compras. Como reconocían algunos de los participantes, al principio el público mira pero no compra y al momento de cerrar tienes más ventas, haciendo bueno el dicho de ser compradores de última hora.
Es una época buena para la adquisición de prendas de ceremonias y complementos de gala, aunque en comarcas como la sanabresa las prendas de invierno o entretiempo tienen aceptación incluso con la primavera adelantada.
El público asistente al mercado pudo participar además en un taller de pintacaras y de transformación de camisetas a lo largo de la tarde, antes de poner punto y final a este primer encuentro con el mundo de las alternativas de diseño. La despedida corrió a cargo del grupo de música tradicional de gaita "Atrapalladas", que puso el broche de oro.
