Una llamativa hilera de coches oficiales ocupó uno de los caminos de la localidad de El Campillo, cuyo casco urbano también se vio ayer invadido por decenas de vehículos que buscaban un hueco en las calles de acceso a la iglesia de San Pedro de la Nave. La numerosa presencia de cargos oficiales, medios de comunicación y otros invitados a la inauguración de la iglesia rompió la tranquilidad del pueblo, que por unas horas se quedó pequeño.