"¡Es cojonudo que desaparezca el dinero, que venía nominativo para las personas!", exclaman en Fermoselle. La gestión del Plan de rehabilitación de parte del centro histórico de la villa de Fermoselle (ARI), cuyo montante total superaba los 3,7 millones de euros, es "una herencia" que pesa como una losa en el Gobierno municipal presidido actualmente por el popular Alejandro Fermoselle, que a partir de febrero deberá hacer frente, en los Juzgados, a las demandas presentadas por afectados o constructores que no han cobrado las subvenciones aportadas por las diferentes administraciones al Ayuntamiento. Son afectados que realizaron las obras, y disponen de las certificaciones correspondientes, pero que han terminado por recurrir a los tribunales forzados de los impagos.

El Consistorio tiene unos 300.000 euros pendientes de abonar por el ARI. Además, debe hacer frente a la devolución de 52.196 euros (más intereses) por subvenciones recibidas de la Junta de Castilla y León, y del Ministerio de la Vivienda, cuyo uso no ha sido justificado.

El ARI ha sido durante la presente la legislatura un asunto de rifirrafe político. Insistentemente la oposición ha exigido conocer el uso de los fondos, sin conseguirlo. ¿Dónde está el dinero destinado a las personas que justificaban las obras? se pregunta la socialista Susana Hernández. Existen crítica, asimismo, de que hubo una presunta preferencia a la filiación política y amiguismo a la hora de pagar las actuaciones. Sobre el particular, el edil Segismundo Barrueco, entonces en el Equipo de Gobierno popular, no aprecia esta inclinación y sostiene que "algunos se dieron más prisa que otros en llevar adelante las obras porque no todos confiaban en que se iba a dar dinero para la mejora de las viviendas".

El alcalde Alejandro Fermoselle ha subrayado, una y otra vez, que se trata "de una herencia" del anterior equipo de Gobierno, dirigido por el popular Manuel Luelmo, uno de los beneficiarios que percibió la ayuda, junto con su hermano, y otros propietarios de viviendas ligados al PP. Tal y como ha informado reiteradamente en Pleno, Fermoselle Berdión achaca la responsabilidad en su predecesor y afirma, en sus escritos, que "desde que soy alcalde hemos recibido la cantidad de 22.374 euros, y se abonaron dos expedientes y el resto a cuenta de otro beneficiario". En su criterio, la aprobación del Plan de Ajuste, rechazado por la oposición en tres ocasiones, hubiera servido "para rebajar la deuda".

La oposición, por su parte, lleva desde el inicio de la legislatura reclamando a la Alcaldía que saque a la luz el uso que se hizo del dinero de las subvenciones y sobre la gestión del ARI. La inhibición en hacer público las cuentas municipales al respecto lo han tildado como un afán por tapar el asunto. Incluso llevaron el caso por dos veces a la Fiscalía, que decidió su archivo porque de la documentación aportada, "no se desprende la existencia de hechos que pudieran ser constitutivos de delito".

Ahora el asunto entra de lleno en los Juzgado, con el consiguiente gasto jurídico para el Ayuntamiento de Fermoselle.

El Ayuntamiento de Fermoselle debe hacer frente a la devolución de 52.196 euros a la Junta de Castilla y León, más los correspondientes intereses de demora, que le son reclamados por la Consejería de Fomento y Medio Ambiente por una subvención directa concedida para la financiación del ARI.

El 15 de noviembre de 2007, la Junta de Castilla y León concedió una subvención directa al Ayuntamiento de Fermoselle por importe de 553.500 euros para la rehabilitación de parte del casco histórico. El 17 de diciembre de 2007, su suscribió el convenio de colaboración entre la Consejería de Fomento y Medio Ambiente y el Ayuntamiento para la financiación de las actuaciones propuestas en el ARI. Ese mismo día la Dirección General de la Vivienda y Arquitectura resolvió el abono de 276.750 euros para la anualidad 2007. Por acuerdo de 10 de diciembre de 2009, la Junta de Castilla y León autorizó a Fomento y Medio Ambiente la concesión de forma directa de una subvención al Ayuntamiento, por importe de 1.002.630 euros, que concede la Consejería por orden del día 24.

Según recoge la orden de reclamación de la Junta, el Servicio de Suelo hizo constar que se han tramitado pagos a favor del Ayuntamiento por importe de 374.028 euros, correspondientes a la aportación del Ministerio, de los que ha sido acreditado el empleo de un total de 374.028 euros. Asimismo, señala que se han tramitado pagos a favor del Ayuntamiento por importe de 276.750 euros, correspondientes a la aportación de la Junta de Castilla y León, de los que se han acreditado el empleo de 224.553 euros. Es debido a estos desfases por lo que la Consejería de Fomento y Medio Ambiente considera que procede iniciar la tramitación del procedimiento de reintegro por el importe de la diferencia entre los pagos realizados y las cantidades certificadas.

Deja claro en su orden que "cuando se haya incumplido la obligación de justificación, o la justificación insuficiente, la normativa establece que se procederá al reintegro de las cantidades percibidas, con el interés de demora". Y señala "la necesidad de justificar las subvenciones públicas mediante facturas y documentos de valor probatorio con validez en el tráfico jurídico-mercantil o con eficacia administrativa". Incluso se remite a sentencias del Tribunal Supremo que indican que "quien pretende obtener en su provecho caudales públicos por vía de la subvención debe guardar una conducta respetuosa en las obligaciones materiales y formales a cuyo cumplimiento se subordina la entrega de aquellos".

La finalización del plazo de vigencia y cumplimiento de las obligaciones conllevó, en aplicación de la Ley, "al deber de reintegrar el importe, y entre las obligaciones está, sin duda, justificar las actuaciones a cuya ejecución venía subordinada la concesión del incentivo".

Segismundo Barrueco critica a Alejandro Fermoselle "por cerrar el ARI, en Valladolid, cuando podía hallarse soluciones. Como es ordeno y mando se cerró en banda". La Alcaldía siempre ha defendido el Plan de Ajuste como el medio de afrontar los pagos.

La Corporación presidida por el popular Alejandro Fermoselle Berdión se encontró, al inicio de la legislatura con "el arrastre de una deuda a proveedores de 131.933 euros, una deuda a los beneficiarios del Área de Rehabilitación del Centro Histórico de Fermoselle (ARI) que ronda los 300.000 euros, y una deuda con Caja Rural de 250.000 euros". ¿Dónde fue a parar el dinero del ARI? es la pregunta más sonada de esta legislatura.