El coordinador de la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL), Jesús Manuel González Palacín, aseguró ayer que "Campofrío da empleo a 3.000 personas y que hay 2.000 granjas afectadas" por el incendio que ha arrasado la factoría cárnica ubicada en Burgos.

En rueda de prensa para informar sobre acciones previstas por UCCL, González Palacín mostró su preocupación por la "incertidumbre" de los ganaderos de porcino que trabajan para esta empresa, que "al día se matan unas 7.000 cabezas de ganado, 35.000 a la semana y 1,5 millones al año" y ahora "no se sabe si van" a poder seguir haciéndolo o no.

Por ello demandó a la consejera de Agricultura y Ganadería, Silvia Clemente, y a la ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, "que busquen alternativas con otros operadores del mismo sector para que absorban la producción".

"Es importante que haya coordinación entre los operadores y que se produzca con celeridad, porque no se pueden almacenar los cerdos", explicó el coordinador de la organización agraria, quien ha confiado en la "voluntad política" para que se solucione la situación de los ganaderos que trabajan para Campofrío.

Por su parte, la cooperativa Cobadu anunció el lunes que mantiene el contrato de venta de cerdos firmado con Campofrío y aseguró, en palabras del responsable del sector que "en principio el siniestro no afectará a la relación comercial porque el matadero y la sala de despiece no se han quemado".