Un particular deberá responsabilizarse de modificar los elementos superiores de la torreta, enclavada en el suelo del término de La Hiniesta, donde los pasados días aparecieron muertas, por electrocución, aves de diferentes especies. Es un tendido de carácter privado, ajeno a la compañía eléctrica Iberdrola, que por lo tanto no tiene responsabilidad en los daños avifaunísticos que se deriven del deficiente estado que presente esta infraestructura. Fuentes de la compañía eléctrica subrayan que no son propietarias de este tendido, al tiempo que destacan su compromiso de contar con unas instalaciones adecuadas para que evitar episodios tan mal vistos y criticados hoy día como la electrocución. La guardería forestal, según informó la Junta de Castilla y León, observaron en el lugar los cadáveres de dos ratoneros, más los restos de otros dos, presumiendo que habían muerto por electrocución al hallarse bajo la cruceta de un poste eléctrico. Además, el hecho de que presentaran quemaduras daba mayor crédito a la causa de su muerte. El particular cuenta con este tendido para suministrar corriente a sus explotaciones.
