Un incendio calcinó ayer una tenada ubicada en pleno casco urbano de la localidad de Argañín sin llegar a afectar a una vivienda habitada gracias a la rápida intervención de los agentes forestales, de los bomberos del Parque de Bermillo y a un importante número de vecinos que acudieron en los primeros momentos para hacer frente al fuego.
El siniestro se inició hacia las 14,30 horas en una tenada de la calle Las Eras sin que ayer se apuntara causa alguna sobre el origen, aunque fuentes vecinales descartaron un cortocircuito. No obstante, entre las hipótesis se baraja la posible realización de unos trabajos que se realizaban en el lugar.
Una vez iniciado el incendio, los vecinos entraron rápidamente en acción haciendo uso de las mangueras y de las bocas de riego instaladas en el pueblo. Incluso hubo quien «se jugó la vida» y, entre otras actuaciones, los personados retiraron un tractor con remolque de un inmueble próximo para evitar su posible pérdida. Fueron momento de tensión porque, en las construcciones típicas sayaguesas, las tenadas preceden al corral que da paso a la vivienda y «existía el riesgo de que las llamas se extendieran a otras construcciones de la manzana de edificios y viviendas».
El fuego adquirió rápidamente grandes dimensiones debido a que en la tenada se almacenaba leña que fue pasto de las llamas, que llegaron a sobresalir «varios metros» sobre la techumbre al decir de fuentes vecinales. También acudieron al lugar algunos vecinos de las localidades de Moralina y de Gamones, que se presentaron para echar una mano nada más ser alertados del incendio.
Los agentes forestales, la Guardia Civil y efectivos de los bomberos de la comarca sayaguesa se personaron sin demora y consiguieron controlar el fuego antes de que alcanzara la vivienda habitada por V. P. P. de 72 años de edad.
«Existía el riesgo de que el fuego se extendiera a otras construcciones»
Fue un incendio aparatoso, que preocupó al vecindario pero que fue atajado con eficiencia por la pronta actuación de los diferentes organismos implicados en la extinción. Los agentes forestales y los bomberos mantuvieron ayer tarde un seguimiento para contar toda posibilidad de rebrote de las llamas.
