Como agua de mayo esperaban ayer los vecinos de la Alta Sanabria la visita semanal del médico y la enfermera tras tres días de temporal, añadidos al fin de semana, en los que solo se han podido atender los casos más urgentes desde el Centro de Salud de la Alta Sanabria, ante la imposibilidad de transitar por la nieve, primero, y las placas de hielo, después. Ahora preocupa el deshielo y las nuevas precipitaciones que se esperan para hoy. Zamora está en riesgo amarillo por deshielo, nevadas y lluvias.
En el consultorio de Barjacoba ayer se podía poner el cartel de completo, porque tras una semana sin consulta todos los usuarios fueron a ver a su médico bien por recetas, tratamientos o por revisiones habituales. Las consultas y las visitas del personal sanitario fueron saltando de Barjacoba, a Lubián, Hedroso, Aciberos? así hasta completar el horario de un jueves habitual, aunque con más demanda.
Aciberos recobraba ayer la normalidad tras tres días complicados por el temporal. La ATS llegaba poco después de la una media de la tarde, cuando uno de los accesos ya estaba despejado, después de los trabajos de la máquina municipal para limpiar una entrada. La otra carretera para entrar al pueblo todavía era impracticable, hasta el punto de que una furgoneta de reparto tuvo que ser remolcada para salir del hielo y la nieve.
Entre las personas pacientes que esperaban a la enfermera está Manuela Rodríguez Silva, pendiente de su tratamiento con Sintrom. Operada de la cadera en el mes de septiembre todavía está en tratamiento. Esta mujer está acostumbrada a la nieve, tanto o más que la caída en esta semana. Cuando era una chavala dormía en una pequeña casa junto a sus tres hermanas. Con las nevadas tenían que esperar a que los mayores abrieran un carril hasta la puerta de la vivienda porque estaba cegada y no se podía abrir. La ventisca hacía acopio de nieve en la misma entrada.
La gente de montaña es previsora de cara al invierno «aquí tengo un arcón y dentro congelo el pan por si algún día el panadero no puede llegar hasta el pueblo». En pocos minutos, Teresa Silva, la ATS le aplica el tratamiento, se despiden afablemente, y la sanitaria prosigue el recorrido. La preocupación principal de la gente es que el médico en caso de apuro pueda llegar a la puerta de casa.
La máquina retroexcavadora del Ayuntamiento de Lubián se demoró en llegar a Aciberos porque quedó atrapada en Padornelo, otro de los anejos del municipio, cuando realizaba tareas de limpieza de las calles. Es una máquina pequeña y de poca capacidad cuando la nevada es abundante. El alcalde mayor, Felipe Lubián, consultaba ayer por Internet los precios de un vehículo «tipo "pick up" con el kit completo, con cuchilla, expendedora de sal, y hasta con luces rotativas y megáfono». La pequeña máquina con que cuentan ahora tarda en llegar una hora a Padornelo, a 8,6 kilómetros de distancia y poco más de 9 minutos de tiempo. Las calles de Aciberos estaban mucho mejor para el tránsito de vehículos y personas. El trabajo que no han hecho, o no han podido hacer las máquinas, lo ha terminado el sol, la lluvia y la temperatura. Ayer se registraron 13 grados de temperatura en Puebla de Sanabria y 9 grados en Lubián. El termómetro no cayó del cero.
La limpieza de las calles de nieve y hielo es otro problema que por sí mismos los Ayuntamientos no pueden acometer por el número de pueblos y por el número de vías. Antaño eran los vecinos los que limpiaban sus calles y el ganado se encargaba de pisotearlo, recordaba una vecina mayor en Trefacio. Ahora no hay ganado y la mayor parte de los residentes son mayores. Algunos visitantes abogan por habilitar fondos y mantener una persona que se dedique al cuidado de las calles.
Donde hay mucho trabajo es en el tramo de la autovía A-52 entre La Canda y Requejo y en los carriles de entrada y salida de la autovía. Los baches, por la combinación de hielo, sal y tránsito de vehículos, se cuenta por cientos en este tramo. Las brigadas de trabajo realizan labores de mantenimiento todos los días, incluso con malas condiciones climatológicas para paliar esos inconvenientes. Hasta que desaparezca la humedad del firme y aumente la temperatura los trabajos para rellenar los agujeros tienen poca efectividad. Hay que reparar incluso señales, balizas, vallas biondas que a veces sufren con el paso de las quitanieves. Incluso las juntas de dilatación de los pasos elevados sufren ese trasiego.
El deshielo fue ayer rápido, por la temperatura y un sol intermitente con ganas de calentar. En pocas horas se deshizo buena parte de la capa que cubría las cotas más bajas, en Puebla, Palacios, Asturianos, Trefacio.
