La Dirección General de Patrimonio de la Junta de Castilla y León ha culminado la restauración de las dos históricas bulas de la cofradía del «Santo Entierro» de Bercianos de Aliste, únicas en su estilo dentro de la Semana Santa de la provincia de Zamora. Los documentos están listos para regresar a la iglesia parroquial de San Cosme y San Damián para que los vecinos, cofrades, devotos y visitantes que acudan a las procesiones del Jueves Santo y Viernes Santo, el 5 y 6 de abril, puedan conocerlas y admirarlas, antes de ponerlas a buen recaudo, ya que su valor, histórico y religioso, más que económico, es incalculable.

Los expertos del Centro de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de Castilla y León, de Simancas (Valladolid), que en 2012 y 2013 hicieron lo propio con la «Urna del Santo Cristo», han realizado un arduo y laborioso trabajo para devolver todo su esplendor original a dos emblemáticos documentos que suman 478 años el más antiguo y 396 el más reciente. Ambas bulas han permanecido durante siglos durmiendo el sueño de los justo en la sacristía, la mayoría de las veces sin prestárseles atención, ya que tampoco nadie se había encargado de traducirlas para saber los que en sí expresaban.

El buque insignia de la Pasión y Muerte de Cristo en Bercianos, por su valor y antigüedad, es la bula que fue concedida a la Hermandad Penitencia de la Santa Vera Cruz de Bercianos por el papa Paulo III en la ciudad de Roma el día 7 de enero de 1536: «cerca del Campo Marcio». Ésta fue emitida por «Francisco por la divina misericordia presbítero cardenal en la santa iglesia de Roma, del título de la Santa Cruz de Jerusalén».

En la histórica bula las indulgencias que se les conceden por parte del sumo pontífice a los cofrades y penitentes alistanos son casi infinitas: « todos y cada uno de los pecados, crímenes, excesos y delitos incluso de los graves y enormes, aunque sean de tal magnitud que se requiera consultar (a su Santidad) sobre la absolución de ellos, excepto los contenidos y expresados en la bula In Caena Domini que se suele leer en la Cena del Señor y la bigamia».

Incluso, cita la bula, «que el confesor les pueda absolver todos y cuales quiera votos que haya hecho, incluso el de las peregrinaciones a las basílicas de San Pedro y San Pablo en Roma y de Santiago de Compostela, excepto los de religión y castidad».

La otra bula, en este caso de privilegios, fue otorgada a la histórica cofradía de la Santa Vera Cruz de Bercianos por el Sumo Pontífice Pablo V en el año 1618. Ambas bulas, dada su importancia, pasarán en breve a estar incluidas como Bienes de Interés Cultural.

El Centro de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de Castilla y León se afana en Simancas en culminar ahora la restauración y recuperación del Santo Cristo, cumpliéndose la promesa hecha en su visita a Bercianos en el mes de marzo de 2013 por el director general de Patrimonio, Enrique Saiz. Cristo y bulas regresarán Bercianos a lo largo de la próxima Cuaresma. Lo que sí es seguro es que el Cristo, ya recuperado, volverá a Bercianos para participar en el sermón del descendimiento y el la procesión del Santo Entierro de Viernes Santo.