El corte en el suministro eléctrico que sufrieron durante más de dos horas usuarios de la capital y pueblos limítrofes tuvo efectos colaterales al mantener encerrado en un ascensor a un vecino de Morales del Vino que se quedó atrapado en el elevador al tratar de llegar a su casa en la tarde del pasado miércoles.

Los hechos ocurrieron pasadas las ocho y media de la tarde cuando un vecino del edificio, ubicado en Juan de Montejo, subía a su piso justo cuando se producía el apagón eléctrico. Fue su hijo quien se movilizó para solicitar ayuda llamando a la compañía eléctrica, así como a los responsables del ascensor. Hasta Morales del Vino llegó un técnico del servicio de mantenimiento, atendiendo la demanda del hijo del afectado y pudo comprobar in situ cómo ya había sido rescatado por la propia comunidad de vecinos, que gracias a la llave maestra pudo rescatar a esta persona.

Según los datos aportados por la compañía eléctrica, los técnicos siguen sin detectar ninguna anomalía en la línea de electricidad que parte de la subestación de San Frontis en la capital, y da cobertura a los habitantes de los arrabales de Zamora, Morales del Vino y San Marcial entre otros. Y si en un principio la luz volvió gracias a que se tomó electricidad de otras líneas, a día de hoy el servicio se ha reestablecido normalmente con la misma subestación y en los centros de transformación que se vieron afectados. Algunos de los usuarios ya han anunciado que pedirán reclamaciones a la compañía eléctrica por los trastornos ocasionados. Lo podrán hacer a través de los puntos de atención que tiene Iberdrola en la capital y telefónicamente en Atención al cliente . Será a través de Iberdrola Comercialización donde se realizarán los partes de daños y perjuicios, previa evaluación de los mismos.

La falta de energía eléctrica , que afectó a 2.800 usuarios, se consiguió recuperar a los 74 minutos para el 88% de los usuarios, mientras que el 100% no se logró hasta los 126 minutos, según datos de la propia compañía.