La subdelegada del Gobierno en Zamora, Clara San Damián, se comprometió ayer a enviar la petición expresada por los trabajadores de la planta eólica de Coreses a los Ministerios de Industria y Fomento. Para ello hará llegar a los responsables de ambas carteras, José Manuel Soria y la zamorana Ana Pastor, un escrito que recoge los motivos por los que la plantilla de Alstom Wind Altamira considera que la fábrica debe seguir en funcionamiento.

El comité de empresa insta a ambos organismos ministeriales a hacer uso de su capacidad de presión hacia la compañía, con la que tiene firmados contratos en otras de sus áreas de actividad. «Los responsables políticos son los que tienen en su mano hacer algo para evitar el cierre de la única empresa de fabricación industrial que queda en una provincia especialmente afectada por la despoblación y el paro», según expone el presidente del comité de empresa, Agustín Bonis. En todo caso, la subdelegada del Gobierno ha matizado a los trabajadores que su papel es el de mero canal de comunicación entre la plantilla y los ministerios.

La reunión mantenida ayer con San Damián no es la única celebrada esta semana por el comité de empresa, que también ha tenido un encuentro con los directores generales de Trabajo y de Industria de la Junta de Castilla y León, Carlos Díez y Carlos Martín. Ambos también transmitieron su apoyo a los empleados y su intención de entrevistarse con representantes de la empresa la semana que viene con el objetivo de evitar o retrasar los expedientes de regulación de empleo que afectan al centenar de operarios zamoranos. En todo caso, la presentación de los mismos se encontraba prevista hoy viernes pero la compañía ha decidido posponerlo hasta el próximo martes.

Asimismo, el comité de empresa también ha mantenido una reunión con el presidente de la Cámara de Comercio, Manuel Vidal, especialmente afectado por el posible cierre de la planta por la implicación de su propia empresa. También se ha comprometido a agotar las opciones para evitar el cierre.