Las localidades de Peleas de Abajo y Peleas de Arriba, de la provincia de Zamora, están entre los municipios españoles que peor fama tienen en la Red, según un informe realizado por identidadlegitima.com, que analiza la reputación digital de algunos de los pueblos españoles. La mala reputación digital, según este estudio, también afecta a otros pueblos con nombres raros o anómalos que pueden ser objeto de burla; y que al teclearlos en los buscadores de la red arrojan resultados que no forman parte de la imagen del ente municipal generando un efecto de distorsión, como en el caso de El Pozo de las Mujeres Muertas (Asturias), La Degollada (Asturias), Los Infiernos (Murcia), Venta de Pantalones (Jaén), Alcantarilla (Murcia), Corte de Peleas (Badajoz), Rascafría (Madrid), Huerta del Rey (Burgos), o los famosos chistes de Lepe (Huelva).
En el caso de las dos Peleas, además del curioso nombre, la de Abajo ha cogido fama en internet como «el pueblo más endeudado de España». Basta poner el nombre en Google para que aparezcan aún referencias a tan desagradable liderato, que se reflejó en los medios de comunicación internacionales, como el USA Today. La de Arriba no tiene otra circunstancia añadida, solo su llamativo nombre, que la sitúa en ocasiones como esta, en estudios de pueblos con nombres curiosos.
El arroyo Valparaíso, que nace en Peleas de Arriba, es el límite de la separación entre dos pueblos, Peleas de Arriba y Peleas de Abajo, lugares donde antiguamente, según recogen distintas crónicas históricas, existió fuerte fricción entre moros y cristianos. Curiosamente Peleas de Abajo está más al norte, pero el apellido surge de estar ubicado en la parte baja del arroyo. La leyenda popular hace referencia a este municipio como refugio de bandoleros que asaltaban a los viajeros que recorría antiguamente la Vía de la Plata. Por su parte en Peleas de Arriba, anejo de Corrales del Vino, estuvo ubicado en su día el monasterio de Valparaíso, uno de los mayores centros de císter en España.
El director de identidadlegitima.com, Francisco Canals, sostiene que a algunos de los 8.116 municipios españoles, «Google no les deja sacar cabeza».
En este sentido, Canals recuerda que «uno de los ejemplos más estremecedores lo tenemos en Alcàsser, pequeño municipio de Valencia marcado en la memoria colectiva por los trágicos sucesos que terminaron con la vida de tres niñas adolescentes, veinte años más tarde y tras teclear la marca municipal en Google sigue apareciendo un largo reguero de noticias negativas que hacen alusión a los dramáticos hechos vividos por este municipio. Otros pueblos del país con trágicos acontecimientos en la memoria colectiva como Puerto Hurraco (Badajoz), Los Galindos (Sevilla), El Salobral (Albacete), La Cornudilla (Valencia) o La Mussara (Catalunya) tienen sus valores turísticos, ambientales o históricos «invisibilizados» en los motores de búsqueda, «con el consecuente prejuicio turístico y económico debido a la evidente falta de un derecho al olvido en Internet».
En ocasiones, recoge el informe, se trata de noticias perjudiciales que siguen gozando de una posición dominante en el Top 10 de Google años o incluso décadas después de una tragedia; en otros casos, se trata de pueblos marcados por los rumores, supuestas maldiciones o incluso la burla colectiva.
