Los vecinos de Alcañices, Santa Ana, Vivinera y Alcorcillo, propietarios de fincas, que con sus acciones originen graves repercusiones en los recursos naturales de los pueblos o el deterioro de estos, existiendo malicia o intencionalidad, «faltas consideradas muy graves», pueden enfrentarse a multas que irán desde los 1.001 a los 2.000 euros. Así lo estipula la nueva ordenanza municipal reguladora de la limpieza y desbroce de fincas y solares urbanos aprobada por la Corporación Municipal que preside el alcalde Tomás Carrión en Pleno y puesta en vigor el pasado viernes.

La nueva normativa municipal estipula que «la limpieza de los terrenos y solares, tanto de propiedad privada como de las administraciones públicas o de sus organismos autónomos, que se encuentren dentro del término municipal de Alcañices le corresponde a su propietario o usufructuario».

De esta manera se establece que los propietarios y usufructuarios de terrenos que se encuentren en un perímetro de 100 metros contados desde la última construcción de cada núcleo de población, hacia la campiña, deberán de mantenerlos rozados y limpios en su totalidad con la periodicidad que sea necesaria su limpieza o bien siempre que se aprecie que la maleza existente tiene riesgo de incendio, tanto para viviendas como para la masa forestal». Tanto dueños como arrendatarios habrán de proceder a su desratización periódica y la desinfección para evitar la proliferación de plagas o problemas sanitarios. Las infracciones leves (no limpiar, ni desinfectar, ni desratizar) se sancionarán con multas de 50 a 300 euros y las consideras como graves de 301 a 1.000 euros.